Cuétara: Krit Original galletas saladas

No todas las galletas son dulces. También existen las saladas como las Krit Original de Cuétara. Pensadas para comer solas o bien para montar algunos aperitivos o canapés son una opción que, sin embargo, hay que usar y comer con precaución. 

Se trata de unas galletas con muchas grasas y calorías. De hecho, un paquet de 100 gramos supone ingerir 500 kilocalorías. Además, si se combina con otro producto puede acabar siendo une explosión, a pesar de su reducido tamaño. A su favor --y algo que seguro atrae al consumidor--, su precio es contenido, aunque existen de otras marcas que ofrecen una cantidad mayor a un coste igual o más bajo. 

Diseño

Estas galletas se presentan envueltas en plástico y apilonadas unas encimas de otras en forma de torre. No es un envase que respete el  medioambiente, pero ocupa poco espacio. 

La cantidad en un paquete es de 100 gramos en total y cuenta con un hilo en color rojo para facilitar la apertura del mismo. Sin embargo, esta sistema no es el mejor para conservar el resto de galletas una vez abierto el envoltorio. El packaging es llamativo con los colores rojo y amarillo como dominantes. 

Características

Las galletas saladas Krit de Cuétara tienen una textura en un primer momento crujiente que, después, se convierte en una especie de masa blanda en la boca. Es fácil que se cuele entre los dientes y, a veces, es complicado deshacerse de los restos que se quedan pegados. Además, su sabor es especialmente salado.

En cuanto a la composición de estas galletas, en cada 100 gramos hay 25 de grasas y 61 de hidratos de carbono. Se trata de unas cifras altas. Después, en un paquete hay 10 gramos de zúcares añadidos y eso que se trata de un alimento salado, así como 6 gramos de proteínas y 2,3 gramos de sal, casi a mitad de la cantidad máxima recomendada a diario. Estas galletas se han elaborado con harina de trigo, aceites vegetales, entre ellos el de palma y el de girasol, glucosa, azúcar, cebada y sal. Por otro lado, contiene aditivos como el fosfato de calcio, un emulsionante sintético, y contiene metabisulfito sódico, un conservante sintético que, en grandes dosis, puede provocar dolores de cabeza, náuseas y vómitos. 

Pros y contras

Una de las ventajas de estas galletallas es su versatilidad. Se pueden comer sin nada más o acompañarlas con multitud de opciones. Además, son muy asequibles y, si se conservan correctamente, pueden durar varios días.

Pero contienen muchas grasas, hidratos y una cantidad de azúcar innecesaria, así como aceite de palma. Las galletas Krit de Cuétara pueden ser una tentación de la que es mejor mantenerse lejos. 

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