Las plantas de interior son mucho más que un recurso ornamental. Son auténticos elementos decorativos y de bienestar. Incorporar vegetación en casa no solo eleva la estética de los espacios, también mejora la calidad del aire, reduce el estrés y aporta serenidad a nuestro día a día.
En un momento en el que pasamos gran parte de nuestro tiempo en interiores, contar con un toque verde en cada estancia se convierte casi en una necesidad. Y si además se trata de una planta con flores, el resultado es inmediato: alegría, calidez y un ambiente acogedor, incluso cuando el frío del invierno se asoma.
La propuesta de Lidl para decorar este otoño
El próximo 3 de octubre, Lidl sorprenderá con una planta que nunca falla en otoño: el kalanchoe. Disponible en un vibrante tono naranja y a un precio de 3,99 euros, es la elección perfecta para quienes quieren llenar su casa de color de temporada sin complicaciones. Y también está disponible en formato mini desde el 1 de octubre a solo 1,99 euros.
Una opción ideal también para dar un aire especial a la decoración de Halloween, con la ventaja de ser una planta muy fácil de cuidar.
Un clásico de interior resistente y agradecido
El kalanchoe pertenece a la familia de las suculentas (Crasulaceae), lo que significa que sus hojas carnosas almacenan agua y nutrientes, haciéndola especialmente resistente a la falta de riego. De hoja perenne y gran adaptabilidad, es perfecta para quienes se inician en el mundo de las plantas de interior.
Los cuidados que requiere son mínimos:
-
Prefiere suelos bien drenados.
-
No tolera el exceso de agua.
-
Requiere luz brillante indirecta.
-
Agradece fertilización ligera en época de floración.
Además, florece sobre todo en primavera y verano, con pequeñas flores en tonos alegres como blanco, amarillo, naranja, rosa o rojo. Un detalle: en variedades como el kalanchoe blossfeldiana sus hojas verdes lucen bordes rojizos, lo que las hace aún más decorativas.
Cómo integrar esta planta en tu decoración
El kalanchoe puede colocarse en solitario en un macetero bonito o formar parte de una composición de varias plantas. Su tamaño compacto lo convierte en el aliado perfecto para espacios pequeños, aportando protagonismo sin ocupar demasiado lugar. En exteriores, puede sobrevivir siempre que esté protegido de heladas y viento fuerte.
Su resistencia es fruto de su origen, Madagascar, un entorno árido donde desarrolló la capacidad de almacenar agua. Por ello, su riego ideal es escaso —aproximadamente cada tres semanas— y siempre es mejor quedarse corto que excederse.
Ficha práctica del kalanchoe
-
Nivel de resistencia: medio
-
Dificultad de cuidado: fácil
-
Tipo de planta: perenne
-
Frecuencia de riego: cada 3 semanas
-
Luz: sol parcial / luz indirecta brillante
-
pH ideal del suelo: 6-7
-
Época de plantación: primavera, verano, otoño e invierno
-
Zona de rusticidad: 10-12
-
Toxicidad: no apta para mascotas
Beneficios de tener plantas en casa
Más allá de su valor decorativo, rodearse de plantas aporta ventajas funcionales y emocionales. Si por lo que sea el kalanchoe no te parece lo suficiente estético, Lidl te trae también Sansevieria (ficus), así como otras plantas colgantes para decorar estantería o techo, sin olvidarnos de su Bromelia, también en tonos anaranjados, que da un toque de lo más otoñal al hogar.
-
Purifican el aire, filtrando toxinas presentes en pinturas, muebles y productos de limpieza.
-
Aumentan la humedad ambiental, cuidando la piel y el sistema respiratorio.
-
Reducen el estrés y la ansiedad, aportando calma y bienestar.
-
Favorecen la concentración y la creatividad, algo especialmente útil en espacios de trabajo o estudio.
-
Aíslan del ruido, gracias a su follaje que actúa como absorbente natural.
-
Mejoran la autoestima, al disfrutar del proceso de cuidarlas y verlas florecer.
-
Aportan calidez y color a los ambientes, conectándonos con la naturaleza, incluso en entornos urbanos.
El kalanchoe es mucho más que una planta de temporada. Es resistente, fácil de mantener y capaz de transformar cualquier rincón con sus flores vibrantes.
Disponible en naranja, es perfecta para ambientar la temporada otoñal y aportar un toque cálido a tus estancias. Resistente y agradecida, solo necesita luz indirecta, poco riego y un suelo bien drenado. Además de embellecer, mejora el aire, reduce el estrés y conecta tu hogar con la naturaleza del otoño de forma sencilla y elegante. ¡Sin necesidad de colocar calabazas por los rincones!