Con la llegada del frío, el Black Friday acechando a la vuelta de la esquina y las primeras luces que anuncian la Navidad, muchos pensionistas empiezan a mirar el calendario con especial atención. Y no solo por las fiestas que se aproximan, sino por la tradicional paga extra de diciembre, que se ha convertido en un alivio económico justo cuando los gastos se disparan por las reuniones familiares, los regalos y las celebraciones.
Este ingreso extraordinario alcanza a la mayoría de los 9,4 millones de pensionistas de España y se suma a la nómina mensual habitual. Se trata, por tanto, de un refuerzo importante en el presupuesto de quienes viven de su pensión, en un contexto de precios al alza y de incertidumbre económica.
¿Cuándo se cobra la paga extra de la pensión en 2025?
La Tesorería General de la Seguridad Social ya ha puesto fecha: la paga extraordinaria de diciembre de 2025 se abonará a finales de noviembre. La idea es que el dinero esté disponible en las cuentas de los pensionistas antes de que empiece diciembre, siguiendo la práctica de los últimos años.
Ahora bien, el día exacto dependerá de la entidad bancaria. La mayoría de los bancos adelantan el ingreso para que los pensionistas lo tengan disponible entre el 22 y el 25 de noviembre. Esta fórmula se implantó durante la pandemia y se ha mantenido para evitar que los beneficiarios pasen apuros a final de mes.
En cuanto a la cuantía, la paga extra equivale a una mensualidad ordinaria de la pensión. Eso sí, siempre que la persona haya cotizado durante todo el semestre anterior. La paga de junio, por ejemplo, se genera entre diciembre y mayo; la de Navidad, entre junio y noviembre.
La excepción: quién no la cobra
Aunque la gran mayoría de los pensionistas disfruta de 14 pagas al año, existe una excepción. Los que perciben una pensión contributiva de incapacidad permanente derivada de accidente laboral o enfermedad profesional solo reciben 12 mensualidades.
Esto no significa que cobren menos. En su caso, la cantidad anual está prorrateada en 12 pagos, de modo que, al final del año, la cifra es similar a la de quienes cobran en 14 veces. La diferencia radica únicamente en la forma en que se distribuye el dinero. En cambio, quienes tengan reconocida una pensión de incapacidad permanente causada por enfermedad común o accidente no laboral sí reciben las dos pagas extra.
Perspectivas para 2026: pensiones y nuevas reglas
Más allá de la paga extra de 2025, las miradas están puestas ya en 2026, un año en el que se esperan cambios importantes en el cálculo de las jubilaciones. La edad ordinaria de retiro en 2025 se mantiene en los 66 años y ocho meses, salvo para quienes acrediten al menos 38 años y tres meses de cotización, que podrán jubilarse a los 65. Pero las reglas seguirán evolucionando, en línea con lo que ocurre en otros países europeos.
El funcionario de la Seguridad Social Alfonso Muñoz Cuenca ha explicado en su canal de YouTube que en 2026 se introducirán dos modificaciones clave: una nueva manera de calcular la base reguladora y un refuerzo en la integración de las llamadas “lagunas de cotización”.
Hasta ahora, la base reguladora se calculaba con las cotizaciones de los últimos 25 años (300 meses). A partir de 2026 coexistirán dos métodos: el actual y otro nuevo que tomará en cuenta los últimos 29 años, eliminando automáticamente los 24 meses de menor aportación. De esta manera, se considerarán únicamente los 27 años más favorables. La Seguridad Social aplicará de oficio el cálculo más beneficioso para cada pensionista, sin necesidad de que este tenga que elegir.
¿Qué pasa con quienes tienen lagunas de cotización?
Las lagunas de cotización son esos períodos en la vida laboral en los que no se hicieron aportaciones a la Seguridad Social, ya sea por desempleo, excedencias, contratos a tiempo parcial o interrupciones para cuidar de hijos. En el sistema actual, los primeros 48 meses sin cotizar se integran con la base mínima, y los siguientes, con la mitad de esa base.
Desde 2026, las condiciones mejoran para ciertos colectivos, especialmente para mujeres y personas con hijos. Los primeros 60 meses sin cotizar se computarán con el 140% de la base mínima, mientras que el resto seguirá al 50%. Con ello se pretende compensar a quienes interrumpieron su carrera profesional por responsabilidades de cuidado, un colectivo mayoritariamente femenino. Según Muñoz, este cambio puede traducirse en un incremento real de la pensión de jubilación de miles de personas.
Un futuro lleno de preguntas
La jubilación sigue siendo uno de los temas que más inquietud despierta en la sociedad. No solo entre quienes están a punto de retirarse, sino también entre quienes ya han superado los 50 años y observan con atención cada modificación legislativa. La gran pregunta es si las pensiones estarán garantizadas en el futuro y en qué condiciones.
Por ahora, lo que sí está asegurado es que este noviembre, millones de pensionistas volverán a recibir su paga extra de Navidad, un ingreso que no solo alivia sus cuentas, sino que también se convierte en motor de consumo en unas fechas donde el gasto se dispara. Y de cara a 2026, el sistema seguirá ajustándose, buscando fórmulas para mantener el equilibrio entre la sostenibilidad de las cuentas públicas y la protección social de quienes ya han trabajado toda una vida.