Barcelona ya tiene un nuevo rey en su skyline. Desde el pasado mes de julio, la Sagrada Familia se ha convertido en el edificio más alto de la ciudad, desbancando a los dos gigantes modernos que hasta ahora dominaban el horizonte, la torre Mapfre y el Hotel Arts.
Este cambio se produce gracias al avance de las obras en la torre central dedicada a Jesucristo, que ha superado ya los 172 metros de altura. Una cifra que sitúa a la basílica por encima de los 154 metros de las torres gemelas del litoral barcelonés.
El nuevo récord del 'skyline'
Con 172,5 metros de altura, la Sagrada Familia ostenta el título de edificio más alto de Barcelona. La torre Mapfre y el Hotel Arts, ambos de 154 metros y levantados en los años 90 como símbolos de modernidad, han reinado durante décadas en lo alto del horizonte urbano. El proyecto iniciado por Gaudí en 1882 se impone como un referente arquitectónico por su historia y su imponente presencia.
Este hito no solo tiene una dimensión estética. La Sagrada Familia es, además, uno de los monumentos más visitados de Europa, con millones de turistas cada año. El hecho de que ahora sea también el edificio más alto de la ciudad refuerza su papel como atractivo turístico de primer orden.
La torre de Jesucristo, a punto de culminar
El ascenso de la Sagrada Familia en el ranking de altura se debe a la torre central dedicada a Jesucristo, que ya ha alcanzado los 172,5 metros y será coronada por una cruz de cuatro brazos. Esta estructura monumental está llamada a convertirse en el corazón simbólico del templo y en el punto más alto de toda la obra de Gaudí.
La previsión es que la torre esté finalizada a finales de 2025 y que la cruz se bendiga e inaugure en junio de 2026. La fecha no es casual. Coincidirá con el centenario de la muerte de Antoni Gaudí, lo que convertirá el acto en una conmemoración cargada de significado histórico y espiritual.
Una obra inacabada que sigue creciendo
Que la Sagrada Familia se haya convertido en el edificio más alto de Barcelona no significa que su construcción haya llegado a su fin. El templo continúa en obras y todavía quedan pendientes torres y detalles arquitectónicos que completarán el proyecto original del arquitecto modernista.
Así, 2026 se presenta como una fecha clave. No solo por el homenaje a Gaudí. Todo apunto a que el próximo año marcará la culminación de uno de los elementos más esperados de la obra tras más de 140 años en construcción.