"Si después de reservar con nosotros, encuentras un precio más bajo para el mismo tren en algún otro sitio, te reembolsamos la diferencia". Así es como Trainline se presenta a los consumidores en su página web.
Una promoción que engatusa al consumidor pero a la que no es tan fácil acceder como parece. Consumidor Global ha investigado cuáles son todos los requisitos para obtener la devolución del dinero y el resultado no es satisfactorio.
Dificultades para encontrar un billete
Trainline es un comparador de billetes de tren. Los precios que los internautas encuentran en su web son prácticamente los mismos que ofrecen las compañías ferroviarias, como Renfe o Ouigo.
"Estamos conectados al sistema de reserva de las compañías de tren, ofreciendo los mismos billetes al mismo precio", recalca la plataforma. Por tanto, encontrar un billete más barato es poco probable. Este medio ha comprado diferentes trayectos, compañías ferroviarias y otros comparadores sin éxito.
Condiciones de la promoción
Los consumidores tampoco lo tienen fácil para obtener el reembolso de la diferencia, si es que encuentran un billete más económico. En primer lugar, hay que reservar el viaje en Trainline. Luego, hay que rellenar un formulario y adjuntar una captura de pantalla de la oferta encontrada. Y, para realizar todos estos trámites, solo hay un plazo de cinco días después de realizar la reserva en Trainline.
No obstante, los requisitos más importantes están detallados en letra pequeña. Debe tratarse del mismo número de tren, misma estación de salida y llegada, fecha y hora de viaje, número de tren, compañía, número de pasajeros, clase y con salida desde España.
Un viaje a Madrid
No obstante, tras realizar distintas búsquedas, Consumidor Global ha encontrado un un billete que invita a los usuarios a reclamar la devolución del dinero. El trayecto Barcelona-Sants con destino Madrid-Puerta de Atocha para el sábado 29 de marzo de 2025 a las 21:05 horas cuesta en Trainline 53,50 euros. Ahora bien, este es el precio para viajar en primera clase, ya que el de segunda clase no está disponible en la plataforma.
Sin embargo, ese mismo billete ha estado disponible en la web oficial de Renfe por 40,20 euros, que es la tarifa básica. Aunque se cumplen todas las condiciones de la promoción de Trainline, los usuarios no podrían obtener el reembolso puesto que no se trata de la misma clase. En la web de Renfe, el billete Elige Confort también cuesta 53,50 euros.
¿Publicidad engañosa?
Ahora bien, la jugarreta publicitaria de Trainline es lícita. De hecho se trata de una práctica muy utilizada por las grandes compañías, por ejemplo las aerolíneas o las cadenas hoteleras. Así lo explica a Consumidor Global, Nacho Somalo, profesor de OBS Business School.
"Ofrecen la garantía de que estás comprando al precio más bajo posible. No quiere decir que no puedas encontrar el mismo precio en otro sitio", argumenta el experto. "Tienes un doble beneficio: lo que transmites al consumidor en cuanto a que tu sitio es una web de precios bajos y para localizar si, puntualmente, no eres el que tiene el precio más bajo", añade.
Trainline guarda silencio
Consumidor Global se ha puesto en contacto con Trainline para analizar en profundidad los detalles de esta promoción. Sin embargo, al término de este reportaje, la compañía guarda silencio.
Teniendo en cuenta las condiciones que aparecen en la letra pequeña de la promoción y el seguimiento realizado por este medio, encontrar un billete más barato en otra web resulta como buscar una aguja en un pajar. Una táctica con la que atraen al consumidor, quien puede acabar pagando un billete de primera en Trainline cuando aún quedan billetes básicos en Renfe, por ejemplo.