Así son los controles intensificados que pasa la fruta procedente de Marruecos que acaba en tu mesa

UPA reconoce que, hasta ahora, este trabajo era “demasiado opaco de cara al conjunto de la sociedad” y celebra que en adelante sea más transparente

Puerto de Algeciras, donde se han implementado nuevos controles / EP - JUNTA DE ANDALUCÍA
Puerto de Algeciras, donde se han implementado nuevos controles / EP - JUNTA DE ANDALUCÍA

La globalización puede pensarse como una lluvia fina muy penetrante o como algo etéreo: la información, las ideas y los flujos financieros son relativamente intangibles y se mueven a través de redes digitales. Ahora bien, hay puntos en los que el orden global se manifiesta con una fisicidad rotunda, monumental. Uno de esos puntos es el Puerto de Algeciras, por donde entran cada año más de 750.000 toneladas de mercancía refrigerada contenerizada procedente de Costa Rica, Perú, Egipto, Colombia o Ecuador.

La piña, el aguacate, la banana y los cítricos son los productos estrella gestionados en las terminales de contenedores del puerto andaluz, un nodo logístico colosal que ahora cuenta con mayores fiscalizaciones.

Controles a las importaciones de terceros

En los últimos meses, los trabajadores del campo españoles se han mantenido alerta: hace unos días, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) se personó en este puerto del sur de Europa para comprobar cómo se habían reforzado los controles en frontera a las importaciones de terceros países.

Unos plátanos / FREEPIK
Unos plátanos / FREEPIK

Era una de las medidas que contemplaba el acuerdo que los agricultores firmaron con el Ministerio de Agricultura el pasado mes de abril, tras un periodo de intensas manifestaciones. Con su visita, UPA evaluaba el programa piloto de implementación de un nuevo sistema de supervisión cuyo objetivo es, explican, poder garantizar en una misma inspección un único control que garantice el cumplimiento de las normas comunitarias, nacionales y de etiquetado. Que todo sea más seguro y que además quede más claro.

Un proceso más operativo

“Una de las cuestiones que demandábamos los agricultores y ganaderos era el reforzamiento de los controles de frontera”, cuenta a este medio Cristóbal Cano, secretario general de UPA en Andalucía. “Creíamos que tenían que aumentarse los medios y hacer el proceso más operativo, con menos burocracia y más coordinación. Y así ha sido”, asegura, satisfecho.

De este modo, uno de los puntos más relevantes es que el nuevo sistema de control está unificado. “Antes, estos controles los compartían los ministerios de Agricultura, Sanidad y Comercio. Ahora se unifica y el mando único lo toma el Ministerio de Agricultura, lo que significa que hay más coordinación, en cuanto a las bases de datos, por ejemplo”.

Puesto de control fronterizo en Algeciras / APBA
Puesto de control fronterizo en Algeciras / APBA

Más celo en las inspecciones

No solo es una mejora cualitativa: cuantitativamente, se ha aumentado el número de controles. “Además, nosotros, como organizaciones agrarias, somos partícipes de ese sistema. Conforme van desarrollándose las campañas y podemos tener algún indicio de que puede haber algún problema en la importación de cualquier producción, a instancias nuestras se identifica o se pone más celo en determinados objetivos”, asegura Cano.

“Eso es en lo que estamos trabajando y lo que fuimos a constatar a Algeciras”, subraya.

Cómo son las inspecciones

Hay dos tipos de inspecciones, explica Cano. La primera es la documental, que consiste en la revisión de las facturas y toda la documentación que tiene que ver con las cuestiones fitosanitarias, el origen, el destino o el pasaporte biológico de las producciones. El día que este representante acudió a Algeciras, se sometieron a este examen pimientos, tomates y bonito congelado de Marruecos, además de piña de Costa Rica y mango de Perú.

Un hombre revisa unos documentos / FREEPIK
Un hombre revisa unos documentos / FREEPIK

En la inspección física, el azar pesa mucho más. “De forma aleatoria, se coge un tráiler, se mete en un muelle de descarga, se descarga la carga o parte de la misma, según el criterio del inspector, se desembalan los palés y se cogen muestras de las producciones que se envían al laboratorio. También se inspeccionan físicamente por si hubiera alguna cosa que se perciba a simple vista que pueda indicar que el alimento tiene alguna plaga o enfermedad”, detalla el responsable de UPA.

Más seguridad alimentaria

“Es un trabajo que quizá ha sido demasiado opaco de cara al conjunto de la sociedad y ahora es más transparente”, considera. “Pensemos que no es una cuestión que solo atañe a agricultores y ganaderos, ni mucho menos. Este trabajo es en beneficio del conjunto de la sociedad y los consumidores, porque lo que queremos todos es que haya seguridad alimentaria de todo lo que entra en nuestras fronteras”.

A partir del 20 de enero, este desarrollo que se ha implementado primero en Algeciras se extenderá a los 45 puestos de control fronterizo de todo el territorio nacional.

Vista del Puerto de Algeciras (Cádiz) / AUTORIDAD PORTUARIA DE LA BAHÍA DE ALGECIRAS
Vista del Puerto de Algeciras (Cádiz) / AUTORIDAD PORTUARIA DE LA BAHÍA DE ALGECIRAS

Alimentos contaminados

En los últimos meses han sido muchas las voces que han pedido mano dura con las importaciones. Uno de los episodios más críticos que despertó las suspicacias de los consumidores ocurrió en marzo, cuando se detectaron en España unas fresas con hepatitis procedentes de Marruecos.

En ese momento, el presidente de la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja), Cristóbal Aguado, criticó que la Comisión Europea hubiera “rebajado la alarma" por la detección de estos alimentos contaminados y afirmó que era "evidente" que en Bruselas había "muchos intereses comerciales" respecto a las importaciones de terceros países. Así, la pregunta que cabe hacerse es si estas mejoras en los controles provocarán que no haya casos así en 2025.

Amplitud de miras

“En este tipo de casos hay que hacer una lectura con amplitud de miras: si saltan las alertas sanitarias y si, como nos consta, se retiran partidas después de la inspección, es porque los controles funcionan. Creo que tampoco podríamos sacar conclusiones positivas si no hubiese alertas sanitarias o retiradas de mercancía”, argumenta el presidente de UPA Andalucía.

Agricultor tira hortalizas al suelo en las protestas agrarias en Algeciras, a 22 de febrero de 2024 / EUROPA PRESS - NONO RICO
Agricultor tira hortalizas al suelo en las protestas agrarias en Algeciras, a 22 de febrero de 2024 / EUROPA PRESS - NONO RICO

“Eso querría decir que los controles son excesivamente buenos o que lo que entra está todo perfecto… Y ni una cosa ni la otra. En todo hay margen de mejora”, razona. Además, señala que los países terceros son cada vez más conscientes de que se juegan no solo su presencia en los mercados, sino su prestigio. “Y tienen cada vez más cuidado en que no haya ningún tipo de problema”, opina Cano.

Empresarios españoles

“Además, no hay que olvidar que detrás de las producciones de terceros países que entran por nuestras fronteras también hay empresarios españoles, para los que tener alertas o problemas de este tipo puede suponer un quebranto económico”, apunta.

El origen del alimento es un factor importante, pero si hay una variable que influye en las decisiones de compra de los consumidores es el precio. Y ahí, los de fuera juegan con ventaja. Los agricultores españoles no creen, por tanto, que los precios siempre sean justos. En este sentido, en ese acuerdo de 43 medidas que suscribió la organización agraria con el Gobierno también se hablaba de reforzar el papel del Observatorio de la Cadena Alimentaria.

Una persona con un carrito en el supermercado / FREEPIK -  jcomp
Una persona con un carrito en el supermercado / FREEPIK - jcomp

Reforzar la Ley de la Cadena Alimentaria

“Necesitamos que se refuerce la Ley de la Cadena Alimentaria. Somos defensores totales de esta normativa”, declara Cano, que apuesta por un régimen de sanción e inspecciones que sea “cada vez más disuasorio”.

“La estabilidad en la cadena alimentaria irá, sin duda, en beneficio de los dos eslabones más débiles de la misma, que somos el primero y el último: los agricultores y ganaderos y los consumidores, respectivamente. Los eslabones centrales, la industria de la distribución, tienen la capacidad suficiente para manejar sus márgenes de beneficios a costa de unos y de otros”, expone, contundente.

Precios del aceite

Una muestra de que algo está fallando está en el aceite de oliva.

Cuencos con aceite de oliva y aceitunas  / FREEPIK
Cuencos con aceite de oliva y aceitunas / FREEPIK

Cano explica que, después de dos años muy malos, “nos recuperamos con una cosecha media, pero en la última semana estamos viendo cómo hay un descalabro en los mercados absolutamente sin sentido, con un hundimiento de precios en origen que no obedece a ningún criterio objetivo”, relata.

Producto español

En cualquier caso, es cierto que, durante las manifestaciones de trabajadores del campo que tuvieron lugar en primavera, muchos consumidores tomaron conciencia de todas las implicaciones de adquirir productos españoles.

“El consumidor cada vez muestra mayor interés, y quiere saber qué hay detrás de lo que consume: tanto la forma en la que se produce, como la repercusión que tiene su decisión de compra. Creo que eso es una muestra de la madurez de la sociedad en su conjunto y que, de alguna forma, nosotros con nuestras protestas hemos despertado esa sensibilización”, opina Cano. Finalmente, al preguntarle por un deseo para el año que viene, el representante de UPA pide “que tengamos salud, buenas cosechas y buenos precios para todos”.