La primera cosecha de una granja de algas a gran escala ya es una realidad. Así lo ha anunciado Amazon. Se trata de un proyecto llevado a cabo junto a North Sea Farm 1, una oenegé apoyada por el fondo Right Now Climate Fund de Amazon.
La granja está ubicada en el mar del Norte, cerca de la costa de Países Bajos. Este espacio se sitúa en un parque eólico marino y ha sido desarrollado por North Sea Farmers.
El objetivo de la granja de algas de Amazon
Gracias a este proyecto, se obtendrá información valiosa sobre la manera en la que las granjas de algas pueden contribuir a reducir las emisiones de carbono. Además, se podrá estudiar el desarrollo del cultivo de algas a gran escala en todo el mundo.
A largo plazo, las granjas de algas marinas también podrían promover la biodiversidad y reducir la presión agrícola, como han indicado sus impulsores en un comunicado. "Esta primera cosecha es un momento de orgullo para North Sea Farmers y Amazon. Junto a North Sea Farmers, hemos demostrado que el cultivo de algas entre turbinas eólicas marinas es un concepto comercial viable", afirma la directora general de Amazon Países Bajos, Eva Faict.
Cómo se recolectan las algas
El proceso de recolección en North Sea Farm 1 requiere del uso de una embarcación especial que navega cuidadosamente entre las turbinas eólicas para recoger las algas maduras de una gran red (50 por 3 metros) anclada bajo la superficie del mar.
Así, los operarios emplean equipos diseñados a medida para recoger la cosecha, que ocupa cinco hectáreas del Mar del Norte. Además, al ubicar la granja entre turbinas eólicas, el equipo de North Sea Farmers ha logrado proteger la instalación del tráfico marítimo de la zona.
Para qué sirven estas algas
Las algas cosechadas pueden utilizarse para la elaboración de una amplia gama de artículos, como textiles y alimentos. Dos ejemplos de la relevancia que puede llegar a tener la producción comercial de algas marinas en el mercado europeo. Además, las algas no necesitan fertilizantes ni pesticidas para crecer, por lo que pueden sustituir a muchos productos que tradicionalmente se cultivan en tierra con productos químicos.
"A través de esta investigación científica, pretendemos demostrar que granjas como esta pueden tener un impacto positivo a largo plazo tanto en la biodiversidad como en la lucha contra el cambio climático. Asimismo, estamos demostrando que la producción de algas marinas en alta mar, a escala comercial y dentro de una infraestructura existente, es posible", ha asegurado por su parte el director general de North Sea Farmers, Eef Brouwers.
Efectos en el ecosistema
Un equipo de investigadores que trabaja con North Sea Farmers (Deltares, Silvestrum Climate Associates y el Laboratorio Marino de Plymouth) ha estado supervisando la granja durante el último año.
Tras la cosecha, los equipos de investigación colaboradores iniciarán un análisis exhaustivo de los patrones de crecimiento de las algas, sus tasas de absorción de carbono y su impacto general en el almacenamiento de carbono del ecosistema en el que se encuentran, así como su efecto en la fauna silvestre. Estos datos servirán para evaluar la capacidad de ampliación de este y otros proyectos futuros de cultivo de algas en parques eólicos marinos.
Otros proyectos en España
Este proyecto ha recibido una financiación de dos millones de euros del fondo Right Now Climate Fund de Amazon. Está situado en el parque eólico Hollandse Kust Zuid, a unos 18 kilómetros de la costa de Scheveningen y se ha gestado durante tres años. La granja se concibió en 2022 y las primeras algas se plantaron el pasado octubre.
En España, el comercio electrónico ha impulsado dos proyectos de este tipo con la financiación del fondo. Por un lado, la reforestación de un área de Sierra Bermeja (Málaga), que quedó devastada por el fuego hace cuatro años. Por otro lado, la ejecución de más de 16 hectáreas de Arco Verde, el proyecto insignia de la Comunidad de Madrid para acercar la naturaleza a la ciudadanía.