Meritxell Hernández (Roll'eat): "El mejor residuo es el que no se genera"
La compañía de envoltorios reutilizables lanza una nueva colección de productos para reducir los plásticos en las compras diarias de los consumidores

Hace 20 años, el equipo de Roll'eat lanzó un producto al mercado que nada tiene que ver con su catálogo actual, pero que sí marcó el inicio de una lucha contra los envases de un solo uso. La compañía nació con el objetivo de ofrecer soluciones a los problemas medioambientales y uno de sus primeros retos fue conseguir un producto para ahorrar agua durante la gran sequía del año 2005.
Crearon un dispositivo que se colocaba en el interior del váter y permitía ahorrar un litro y medio de agua. El éxito se tradujo en más de un millón de unidades vendidas. Fue entonces cuando prestaron atención a la gran cantidad de residuos que generaba el papel de aluminio en los colegios y lanzaron el popular Boc'n'Roll, un envoltorio reutilizable para bocadillos. Una historia que cuenta la propia Meritxell Hernández, CEO de Roll'eat, durante la entrevista concedida a Consumidor Global.
--Han lanzado una nueva colección, Good Buy. ¿Qué tiene de especial?
--Igual que en todos los productos anteriores, el objetivo ha sido erradicar los envases de un solo uso en las comidas. Con Good Buy queremos eliminar los envases desechables en las compras diarias.
--¿Y cómo lo hacen?
--Hasta ahora se ha puesto mucho énfasis en reducir las bolsas de plástico de la compra pero no tanto en la cantidad de envases que se utilizan para envolver embutidos, carnes o pescados. Good Buy consta de una bolsa con dos compartimentos. Uno de ellos es impermeable para los alimentos más delicados y se complementa con unos envoltorios reutilizables para embutidos, carnes o pescados. No ocupa nada y siempre los puedes llevar encima.
--En términos de sostenibilidad, ¿cómo cree que han evolucionado los consumidores?
--Hace casi 18 años que lanzamos nuestro primer producto para evitar la generación de residuos, el Boc'n'Roll. En ese momento, sí que había gente que dudaba de que la población estuviera dispuesta a renunciar al papel de aluminio. Sin embargo, hemos visto durante todos estos años que muchísimas personas han incorporado este cambio en su rutina diaria. Yo creo que la gente cada vez está más sensibilizada, hemos visto una evolución muy grande.
--¿Qué otros cambios se han producido?
--Es un cambio de mentalidad. Hasta ahora, la mayoría asocia lo desechable a la comodidad pero cada vez hay más gente que piensa que la comodidad es reducir pasos y simplificar. Cuesta lo mismo envolver un bocadillo con papel de aluminio que hacerlo con un envoltorio reutilizable como el Boc'n'Roll.
--¿Cuáles son los efectos negativos del papel de aluminio en el medio ambiente?
--El papel de aluminio es una generación de residuos innecesaria. La extracción de aluminio requiere unas cantidades ingentes de energía. Si se mira todo el ciclo de vida que tiene el aluminio desde la extracción hasta el final es inmenso. Tenemos que evitar el reciclaje, lo que tenemos que hacer es prevenir. Esto es por lo que nosotros hemos estado luchando durante todo este tiempo. El mejor residuo es el que no se genera, eso está claro.
--¿Cómo convencería a una persona que no quiere optar por lo sostenible para no renunciar a la comodidad?
--Pues que es una creencia limitante. La gente cuando prueba un envoltorio reutilizable versus el papel de aluminio, ya no cambia. Te cuesta exactamente lo mismo preparar un bocadillo con un Boc'n'Roll que con papel de aluminio. Y luego evitas tener que tirarlo. Además también está la parte económica. La gente que compra las bolsas Bipper, según la cantidad de bolsas o de papel de aluminio que utilicen, en seis meses ya estaría amortizando esa compra [Boc'n'Roll].
--Las alternativas sostenibles están asociadas a un mayor precio. ¿Cómo se justifica?
--Si piensa a corto plazo, el precio siempre va a ser una barrera. Pero si piensa a medio o largo plazo, no es un problema. Es evidente que hay alimentos que son bio y sí son más caros. Pero para la reducción de residuos, yo creo que no hay excusas con los precios. Todo lo que es reutilizable se acaba amortizando.
--Todo lo que comenta afecta a los consumidores pero ¿cómo se podrían implementar medidas más sostenibles en los supermercados? ¿Sería más fácil si ofrecieran a los clientes los envases reutilizables?
--Sí, claro, eso sería ideal. Sería más fácil si los supermercados pudieran hacer campañas de sensibilización. Al final, el consumidor también quiere ver que las empresas en las que confían y donde compran también hacen algo [por el medio ambiente]. Todos tenemos responsabilidad. En los supermercados, se pueden hacer mil cosas, pueden darlos a conocer regalándolos durante un tiempo o a los clientes más fieles, aunque depende del presupuesto que tengan.