Se acabó. LG Electronics desiste y dejará de fabricar teléfonos móviles. La firma surcoreana no encuentra su lugar en este sector y se ve incapaz de competir. De hecho, en los últimos cinco años la compañía ha acumulado unas pérdidas de 4.400 millones de dólares --unos 3.750 millones de euros-- en este segmento.
La empresa anunció la decisión este lunes y señaló que ahora sus esfuerzos se redirigirán al desarrollo de las líneas de negocio vinculadas a los vehículos eléctricos, la futura tecnología 6G, la robótica, la domótica y la inteligencia artificial.
¿Qué ocurre con los clientes que tengan un móvil LG?
La empresa prevé "que la liquidación del negocio de telefonía móvil se complete el 31 de julio”, aunque indica que los inventarios de algunos modelos aún podrían estar disponibles tras esa fecha. Hasta entonces, el catálogo de smartphones de LG seguirá disponible para la venta al público y la firma "brindará soporte en cuanto a servicio y actualizaciones de software” durante un período de tiempo que “variará según la región".
La compañía aspiraba a ganar terreno en la gama media con smartphones como el LG Wing --un dispositivo de doble pantalla-- o el Velvet. Sin embargo, el volumen de ventas de estos móviles no ha sido buena y no ha sido suficiente para convencer a la directiva de la compañía y mantener a flote la división de telefonía.
Comenzó a producir teléfonos en 1995
La gama alta de smartphones la dominan Apple, Samsung y algunos fabricantes chinos. En tanto, las categorías media y baja están superpobladas y el empuje de un creciente número de competidores --en su mayoría chinos-- ha provocado que LG haya decidido claudicar. En este contexto, la compañía surcoreana da carpetazo a una línea de negocio que comenzó a explotar en 1995 con la creación de LG Information & Communications.
Esa unidad de negocio fue absorbida por LG Electronics en el año 2000 y llegó a convertirse en el tercer fabricante mundial de móviles. En la actualidad ocupa la novena posición global, con sólo un 2 % de cuota de mercado tras vender 24,3 millones de smartphones el año pasado --un 13 % menos que en 2019--, según datos de la consultora Counterpoint Research. Se da por hecho que la salida de este mercado supondrá una caída a corto plazo de la facturación de LG, aunque muchos analistas surcoreanos consideran que saneará sus cuentas y que su beneficio operativo para 2021 podría incrementarse en unos 885 millones de dólares --unos 751 millones de euros--.