El coche eléctrico no tira y los gigantes de la industria vuelven a la combustión

Marcas como Porsche, Ford o General Motors rebajan su ambición verde y miran de nuevo a la gasolina y el diésel

Una conductora carga su coche eléctrico / FREEPIK - senivpetro
Una conductora carga su coche eléctrico / FREEPIK - senivpetro

En el sector del vehículo eléctrico, la esperanza en el cambio choca constantemente con obstáculos y desafíos. Las ventas en Europa aumentaron un 24% en el primer semestre de 2025 respecto al mismo periodo del año anterior, y un 71% en España, según un estudio de Boston Consulting Group, realizado por la Asociación de Operadores de Recarga Ultrarrápida (Aoru) junto a una coalición de empresas del sector energético y de la movilidad. Sin embargo, no es suficiente.

Al menos así lo cree Stellantis, uno de los grupos automovilísticos más poderosos del mundo, que aglutina marcas como Fiat, Chrysler, Jeep, Peugeot o Citroën y que ahora ha reculado: anunció que a partir de 2030 dejaría de vender coches de combustión en Europa, pero ha dado marcha atrás en su plan.

Una normativa más laxa

Esta decisión llega en un contexto marcado por la flexibilización de la postura europea, ya que la Comisión ha aceptado elaborar una normativa más laxa en lo relativo a la venta de vehículos de combustión a partir de 2035. En concreto, la Comisión Europea ha dado a los fabricantes de automóviles europeos dos años más para cumplir unos límites de emisiones de CO2 más estrictos.

Una planta de ensamblaje de automóviles / FREEPIK - usertrmk
Una planta de ensamblaje de automóviles / FREEPIK - usertrmk

El viraje ha sido generalizado. Tal y como recoge El País, Porsche ha anunciado una “reorientación estratégica integral” que implica un retorno al coche de combustión, Ford ha dado “claros pasos atrás en electromovilidad” al optar por los híbridos y no por los eléctricos, y General Motors “ya está reduciendo la producción de eléctricos”. Incluso Volvo, que prometió que solo vendería eléctricos a partir de 2030, ha decidido que seguirá ofreciendo híbridos.

Preferencias de los consumidores

Los eléctricos, en definitiva, no han alcanzado la pujanza esperada por determinados sectores y empresas. En este sentido, un estudio realizado por carVertical refleja que la mitad de los conductores con intención de comprar un vehículo (51,5%) no valora optar por un eléctrico, y solo el 12,2% estaría dispuesto a tomar esa decisión.

De hecho, cuatro de cada diez (43,8%) de los 16.000 encuestados de 35 países distintos afirma que prefiere los modelos de gasolina, y un 38,9% se decanta por el diésel. Los híbridos apenas alcanzan el 10,4%, y los eléctricos se sitúan en un reducido 5,6%. Entre los principales motivos para elegir un coche de combustión frente a un eléctrico figuran la confianza y el precio. 

Coches en un concesionario / FREEPIK - ArtPhoto studio
Coches en un concesionario / FREEPIK - ArtPhoto studio

Los trabajadores no pueden pagar coches eléctricos

El coste es, por supuesto, determinante. Así lo recordó Luca de Meo, CEO de Renault, que en un foro celebrado en mayo declaró “que a principios del siglo XX un trabajador de Ford podía comprarse un coche nuevo, algo que hoy parece imposible incluso para los operarios de Renault”, publicó Business Insider.

“El CEO afirmó que se ha llegado a un punto en que la innovación se queda en los catálogos porque la gente no puede pagarla”, recogió el citado medio.