Con 86 años cumplidos, Carolina Herrera sigue siendo un icono de sofisticación, pero también de equilibrio físico y vitalidad. Lejos de seguir tendencias pasajeras o dietas extremas, la diseñadora apuesta por un enfoque nutricional sostenido en el tiempo, basado en la variedad, la calidad de los alimentos y la constancia.
¿Su secreto? Una pauta alimentaria con seis ingestas al día, distribuidas de forma estratégica para mantener su energía, su silueta esbelta y su bienestar general.
La rutina alimentaria de Carolina Herrera: comida y energía se dan la mano y desafían la edad
Carolina Herrera no solo ha dejado huella en la industria de la moda con su estilo atemporal y sus diseños admirados incluso por la realeza europea.
Su imagen impecable también refleja un compromiso firme con el autocuidado. Según ha compartido recientemente en una entrevista para el medio especializado Women’s Health, la clave de su vitalidad no reside en trucos milagrosos, sino en un modo de vida saludable, donde la alimentación juega un papel esencial.
Su enfoque: alimentos reales, sin restricciones imposibles
A diferencia de muchas corrientes que promueven el ayuno intermitente o dietas restrictivas, Herrera defiende una alimentación completa, sin extremos, donde la prioridad es el equilibrio.
Para ella, más que contar calorías, lo importante es seleccionar ingredientes que nutran, que aporten energía sostenida y que apoyen la longevidad. “Conozco lo que me sienta bien, aunque no me guste cocinar”, ha comentado en varias ocasiones.
Un día en el menú de Carolina Herrera
Su modelo de alimentación se basa en tres comidas principales y tres tentempiés distribuidos entre ellas. Esto no solo ayuda a mantener estable su metabolismo, sino que le evita los clásicos altibajos de energía durante el día.
Desayuno completo: La jornada comienza con un tazón de yogur griego sin azúcar, acompañado de frutas antioxidantes como fresas, plátano o arándanos. Para sumar textura y nutrientes, a veces añade frutos secos o granola baja en azúcares.
Media mañana ligera: Cuando siente la necesidad de un refuerzo para su energía, recurre a opciones simples y saludables, como un puñado de almendras o una pieza de fruta rica en fibra.
Almuerzo equilibrado: Suele optar por una ensalada variada con vegetales como pepino, aguacate y tomate, acompañada de una proteína ligera: pollo a la plancha o salmón, según el día.
Merienda nutritiva: A media tarde, apuesta por un batido verde elaborado con espinacas, piña, pepino y un toque de jengibre, ideal para refrescar y revitalizar sin recurrir al azúcar.
Cena ligera: La última comida del día se basa en platos bajos en carbohidratos refinados. Suele preferir salmón o algún pescado blanco, acompañado de verduras al vapor o quinoa.
Antes de dormir: Si aparece el hambre nocturna, recurre a un pequeño puñado de nueces o avellanas, que aportan saciedad sin interferir con el sueño. Antes de irse a dormir, siempre se toma una infusión sin cafeína para favorecer un buen descanso.
Alimentación consciente, una filosofía que va más allá de la estética
Para Carolina Herrera, no se trata solo de verse bien, sino de sentirse bien. Por eso da prioridad a una rutina que la ayude a descansar mejor, mantener la concentración y vivir con energía.
Según explica la farmacéutica y experta en nutrición Belén Acero, esta pauta de alimentación “mantiene activo el metabolismo y reduce los picos de ansiedad o fatiga a lo largo del día”. Además, evita azúcares añadidos, ultraprocesados o grasas poco saludables. Prefiere lo natural, lo fresco, y lo que sabe que la ayuda a mantenerse fuerte.
¿Y qué lugar ocupan los huevos en su dieta?
Herrera ha confesado que uno de sus platos favoritos son los huevos revueltos con trufa. Un gusto refinado que también responde a un perfil nutricional muy valioso. Y no es la única en apostar por este alimento. En España, el consumo de huevos ha crecido notablemente: en el último año se consumieron más de 400 millones de kilos, lo que supone una media de 137 huevos por persona.
El huevo, que durante años fue puesto en duda por su relación con el colesterol, ha vuelto a ganarse un lugar clave en la alimentación saludable por su alto contenido en proteínas, vitaminas y minerales esenciales.
Pese a su popularidad y valor nutricional, el coste del huevo también ha comenzado a escalar. Según datos recientes de la OCU, en solo dos semanas, el precio de la docena ha pasado de 2,10 a 2,60 euros, lo que ha generado inquietud entre consumidores y productores. Aun así, continúa siendo una opción accesible y versátil en la dieta diaria.
Carolina Herrera: una lección de longevidad
El ejemplo de Carolina Herrera demuestra que la constancia y la simplicidad son claves para mantener una salud estable a lo largo del tiempo. Su enfoque no solo resalta la importancia de comer bien, sino también de escuchar al cuerpo, entender lo que necesita y adaptar la alimentación a cada etapa de la vida.
Comer seis veces al día, sin prisas ni modas, puede parecer un planteamiento clásico. Pero en tiempos donde lo extremo muchas veces se impone, su filosofía cobra más vigencia que nunca.