The Cotton Brand, la marca 'slow fashion' de Carla Cotterli criticada por vender ropa china

La firma dice apostar por prendas minimalistas que no pasan de moda pero demora el envío de cupones (no realizan reembolsos) y ‘toma’ artículos de plataformas como AliExpress

Una chica hace una compra online en The Cotton Brand / FREEPIK - gpointstudio
Una chica hace una compra online en The Cotton Brand / FREEPIK - gpointstudio

El auge del comercio electrónico ha traído consigo un molestísimo aumento de páginas web engañosas, especialmente en el sector de la moda. Estas webs suelen utilizar tácticas para atraer a los compradores y luego ofrecerles productos que no cumplen con las expectativas generadas o, incluso, no envían los artículos adquiridos. The Cotton Brand es una de esas páginas.

“TheCottonBrand impulsa las prendas esenciales atemporales como base de todas sus colecciones, haciendo homenaje a los barrios más emblemáticos de Londres con cada una de sus piezas. Colores neutros y prendas oversize con un toque vintage que ceden todo el protagonismo a un minimalismo que viene para quedarse, apostando por un slow fashion y consiguiendo un perfecto fondo de armario compuesto por prendas que no pasan de moda”, se dice sobre la marca en Cotterli.com.

Carla Cotterli

No es una descripción baladí. Cotterli, compañía fundada por la influencer y empresaria Carla Cotterli (pareja del expolítico Albert Rivera), abarca distintas áreas de negocio: influencer marketing, organización de eventos y creación de contenido para webs y redes sociales de marcas. Han colaborado, por ejemplo, en campañas de L’Occitane o Álvaro Moreno.

Una prenda a la venta en The Cotton Brand / CG
Una prenda a la venta en The Cotton Brand / CG

La pata textil del negocio es The Cotton Brand, una tienda online que plantea varios interrogantes. En primer lugar, la mención a la slow fashion resulta equívoca: tal y como se puede comprobar con la herramienta Google Lens, muchas de las prendas que comercializa The Cotton Brand están sacadas de Amazon o de AliExpress (summum del fast fashion), plataformas donde son mucho más baratas.

Prendas de Amazon o AliExpress

Por ejemplo, una de las primeras prendas que aparece en la web es una cazadora, supuestamente de cuero vegano, que lleva el nombre de Bayswater Vintage Jacket. Cuesta 89,99 euros… y la misma, exactamente igual, se vende en Amazon por 59,99 dólares (donde especifican, por cierto, que está hecha de poliéster).

Chaqueta de The Cotton Brand / CG
Chaqueta de The Cotton Brand / CG

La segunda prenda que aparece en la web es una camisa holgada, Belgravia Shirt que cuesta 39,99 euros… y cuya imagen está extraída de AliExpress, donde la prenda cuesta 20,79 euros. Algo más abajo hay una gabardina larga a rayas que cuesta 39,99 euros en AliExpress y 120 en The Cotton Brand.

Misma chaqueta en Amazon / CG
Misma chaqueta en Amazon / CG

Una marca “cuidada” con una web simple

“Conocí la marca a través de una influencer que mostró un vestido en redes sociales y dijo que era de The Cotton Brand”, cuenta a Consumidor Global M. Renart. “Eché un vistazo y me pareció una marca cuidada y a priori interesante, aunque es cierto que la web era bastante simple, pero no tenía mala pinta”, recuerda.

Tentada, se decidió a comprar un vestido. “Cuando me llegó, vi que era diferente al anunciado en la web y no me gustaba cómo me quedaba. Quise devolverlo, y ahí comenzó el lío”, narra. “No te devolvían el dinero, sino que te daban un cupón con el importe. No es lo ideal, pero bueno, así lo hacían”, describe esta compradora.

Código para canjear

Esa es la política de la marca: “Una vez recibido el pedido, te enviaremos un CÓDIGO por el valor del importe de tu pedido menos el coste del envío para que lo canjees en nuestra web por aquello que más te guste de nuestra colección”, indican en su página web.

Una persona abre un paquete / PEXELS
Una persona abre un paquete / PEXELS

Renart envió el paquete a la dirección solicitada (un piso de la céntrica calle Génova de Madrid), pero pasaban los días y no obtenía su cheque. “Ellos, proactivamente, no envían el cupón. Mandé dos o tres correos e incluso intenté escribir un comentario en Instagram, y fue entonces cuando vi que tenían todos los comentarios desactivados. Comencé a sospechar”, narra.

Una muy mala experiencia

Transcurrieron tres meses hasta que la compañía decidió actuar. Lo hizo tras la publicación de una crítica por parte de la compradora en un foro de valoraciones. “Me enviaron un mail en el que pedían disculpas y me adjuntaban el código a canjear. No sé por qué tardaron tanto y decidieron actuar en ese momento, supongo que había mucha gente quejándose, como yo, y tuvieron que tomar medidas. En cualquier caso, fue una muy mala experiencia y desde luego terminé descontenta”, expresa Renart.

Canjeó su código por una chaqueta de pelo que llegó con un “packaging cutre: una bolsa blanca sin más”. “Nada cuidado, ni una tarjetita ni nada. No era lo que esperaba. La chaqueta no está mal, me la pongo y más o menos me gusta, pero se ve que la calidad no se corresponde con el precio. No creo que lo que pagas tenga el valor de la prenda”, recalca.

Prendas chinas

Renart ha compartido con este medio una fotografía de la etiqueta de dicha chaqueta. La información aparece en chino, y se aclara que la piel es “importada” y el forro de poliéster.

Asimismo, en Trustpilot hay casi 100 opiniones sobre The Cotton Brand, la mayoría muy malas. “Empresa estafadora. Me han robado 230 euros: no me enviaron ningún artículo, no me responden, me han bloqueado”, clamaba una afectada. “SHEIN tiene 1000 veces más calidad, servicio y parecido. Precio desorbitado para lo que te acaba llegando al cabo de un mes, y que no se parece en nada a la foto. Ni siquiera se molestan en etiquetar con su marca… sin responder mails ni seguimiento de envío. Robo”, alertaba otro en enero.

Un hombre hace una compra online / PEXELS
Un hombre hace una compra online / PEXELS

“Pésima calidad”

“Lo que he recibido es de pésima calidad. Vamos, que es la misma marca china que puedes encontrar en Shein por la mitad de precio. Cualquier parecido con la foto es puro filtro. No volveré a comprar”, denunciaba otro comprador molesto.

Tal y como se publicó en el Boletín Oficial del Registro Mercantil en mayo de 2022, THE COTTON BRAND SL. se constituyó en marzo de 2022 con un capital de 3.000 euros, y los administradores solidarios son Cristina Vedia Fernández y Carla Bustos Cotterli. Vedia también es la corresponsable de The Nape Brand, una firma que ya ha recibido acusaciones de estafa de las que se ha hecho eco este medio. Hace solo unas semanas, dos consumidores escribían en el Instagram de Nape asegurando que la firma era “un fraude” y que el pedido jamás había llegado. A la par, The Cotton Brand respondía con unos emoticonos de corazones.

Página de Nape The Brand / CG
Página de Nape The Brand / CG

Consumidor Global ha preguntado a Carla Cotterli dónde se elaboran las prendas que comercializan, si consideran que el título de marca es engañoso (la mención al algodón, cotton, puede inclinar al consumidor a pensar que los textiles son de calidad) y por qué dificultan las devoluciones, pero, al término de este reportaje, la influencer no ha contestado.