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Sólo la mitad de los consumidores lee la etiqueta de un producto antes de comprarlo

Muchos usuarios todavía no saben diferenciar una fecha de caducidad de una de consumo preferente

Una consumidora lee la etiqueta del producto que está a punto de comprar / PEXELS
Una consumidora lee la etiqueta del producto que está a punto de comprar / PEXELS

Sólo la mitad de los consumidores españoles admite leer la etiqueta de un producto antes de comprarlo. Así lo corrobora una encuesta de hábitos de compra y consumo realizada por la Mesa de Participación de las Asociaciones de Consumidores (MPAC) a partir de una consulta a 6.000 personas. 

Además, otro dato que llama la atención es que uno de cada cuatro usuarios no sabe diferenciar entre la fecha de caducidad y la fecha de consumo preferente de los alimentos. 

La etiqueta es el DNI de un alimento 

Una mujer mira bien un producto del supermercado / LAURA JAMES-PEXELS
Una mujer mira bien un producto del supermercado / LAURA JAMES-PEXELS
 

Clara Medina, directora de relaciones con asociaciones de consumidores de Mercadona, remarca que las etiquetas deberían de ser más fáciles y entendibles. “La etiqueta es el DNI de cualquier alimento y nunca debería de generar confusión o desinformación", matiza. 

Sobre sistemas como Nutriscore, Medina aboga por una homogeneización en toda Europa e insiste en que "si queremos productos de calidad hay que ofrecer información de calidad" también. 

Los graves riesgos de consumir un producto pasada la fecha de caducidad 

Además, los expertos en nutrición advierten de por qué no se debe consumir un producto pasada la fecha de caducidad. En concreto, Àlex Blasco, miembro de la junta directiva del Colegio de Nutricionistas y Dietistas de Cataluña, asegura que si se hace eso "asumimos un riesgo de intoxicación microbiológica grave". 

Este especialista insiste en que lo más importante de un alimento "es que sea seguro". Por ello, recomienda priorizar la calidad a la cantidad, evitar las grasas saturadas, así como los altos niveles de sal y azúcares, y que el nombre del producto coincida con el primer ingrediente del mismo. 

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