Al igual que algo se muere en el alma cuando un amigo se va, algo se marchita en el corazón de las ciudades cuando se produce el cierre de un comercio histórico. Es el caso del Café Central, uno de los locales más emblemáticos de Madrid y referente internacional del jazz, que ha anunciado su cierre definitivo tras más de cuatro décadas de actividad ininterrumpida.
El próximo 12 de octubre el club celebrará su último concierto en su actual sede de la Plaza del Ángel, poniendo fin así a una etapa que ha marcado la historia cultural reciente de Madrid. Son muchos los clientes que han expresado su tristeza por el inminente cierre de lo que consideran una meca del jazz, donde "si querías escuchar música en directo, podías venir desde hace muchísimo tiempo".
El contrato de Café Central no se renueva
Asimismo, el local ha sido descrito como un espacio "muy acogedor" donde "la gente joven y mayor se mezcla" y que ha sido testigo de infinidad de actuaciones musicales. La clausura se debe a la negativa de los propietarios del inmueble a renovar el contrato de alquiler del local, según ha informado la dirección, a pesar de "los múltiples intentos" de negociación durante los últimos siete años.
De hecho, eldiario.es ha titulado que ha sido “la especulación inmobiliaria” la que ha provocado el cierre del establecimiento. Además, los responsables del Café han lamentado que no haya sido posible alcanzar un acuerdo ni conocer las condiciones para la continuidad del proyecto en su ubicación actual. Sin embargo, no se resigna a la desaparición: el club ya busca un nuevo emplazamiento.
“Parada obligatoria”
En redes sociales, muchos usuarios han lamentado esta pérdida. “Fue mi hermano Miguel quien me llevó allí por 1 vez, al igual que al Whisky Jazz y me metió de lleno en el mundo de esta música allá por los 70 del pasado siglo. Y desde entonces parada obligatoria cuando iba a Madrid...”, decía un internauta en X.
Se ha abierto incluso una página en Change.org que pide “detener el cierre” del espacio. Ya suma más de 1.000 firmantes que piden además que se reconozca dicho lugar “como un espacio de especial significación ciudadana e interés general”.
Un templo cultural
En esta línea, algunos representantes políticos, como Reyes Maroto (exministra de Industria y Turismo y candidata por el PSOE a la alcaldía de Madrid en las elecciones municipales de mayo de 2023) ha lamentado que sea “otro templo cultural” que Madrid "deja perder". “En una ciudad que borra su alma a golpe de negocio inmobiliario, ¿qué nos quedará cuando ya no queden lugares con historia?”, se preguntaba la concejala.
"El cierre del Café Central es el adiós de una forma de habitar la ciudad. Con una programación jazzística llena de criterio y mimo. Es una sala como un viejo club de Nueva York. Público y músicos juntos, en comunión. El modelo Miami está matando al Madrid cultural más maravilloso", ha lamentado Fernando Navarro, experto musical de El País.