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El mejor aceite de oliva virgen extra del mundo es español y ha sido premiado nueve veces

El galardón se lo ha llevado un AOVE de variedad picual procedente de Castilla-La Mancha

Ana Siles

Aceite de oliva / FREEPIK

En el mundo del aceite de oliva virgen extra (AOVE), la competencia es cada vez más intensa. Cada año, expertos catadores de todo el mundo evalúan cientos de referencias, buscando el equilibrio perfecto entre aroma, sabor y textura. 

Este año, el reconocimiento ha vuelto a quedarse en España: Palacio de Los Olivos Picual, producido en Olivapalacios (Almagro, Ciudad Real), ha sido premiado por noveno año consecutivo como el mejor aceite del mundo en su variedad, según el Evoo World Ranking. Con más de 300 medallas nacionales e internacionales, este AOVE manchego se consolida como un referente global y como "el Picual más premiado del mundo".

Un aceite de oliva virgen extra de récord mundial

Desde la campaña 2016-17, Palacio de Los Olivos Picual ha acumulado reconocimientos en ciudades como Nueva York, Los Ángeles, Buenos Aires, Lisboa, París, Berlín, Zurich, Milán, Atenas, Londres, Beijing, Tel-Aviv y Tokio

Palacio de Los Olivos, AOVE de variedad picual reconocido como el mejor del mundo / CG

La almazara española ha explicado que Palacio de Los Olivos Picual sea catalogado como el aceite de oliva virgen extra más premiado del mundo desde la campaña de 2016-17 confirma a la firma como un "referente indiscutible a escala global". Así, subrayan que el éxito sostenido se debe a la "magnífica combinación de un equipo humano implicado y un proceso de elaboración cuidado al detalle".

Tierra, sostenibilidad y tradición

El secreto de Palacio de Los Olivos está en sus olivos, cultivados en tierras de Almagro, donde el clima y el suelo aportan características únicas al fruto. Además, la almazara apuesta por técnicas sostenibles para garantizar que la excelencia del aceite no comprometa la salud del entorno.

De esta forma, destaca que en un sector "tan exigente y competitivo", mantenerse durante tantos años en los primeros puestos demuestra que la calidad sostenida requiere "constancia, técnica cuidada y una visión clara" de lo que significa un aceite de oliva virgen extra.