Transformar los espacios exteriores con cada estación no implica grandes inversiones ni proyectos complicados. A solo unos días de despedirnos por completo del verano y con el otoño pisándonos los talones, has de saber que con pequeños cambios en la decoración y un poco de creatividad es posible redescubrir terrazas, balcones o jardines para seguir disfrutándolos en otoño, incluso cuando los días son más cortos y las noches más frescas.
¿Qué tal un picoteo entre amigos estilo afterwork? Una terraza puede ser la zona perfecta para relajarte al final del día y aprovechar las buenas temperaturas de septiembre.
El truco 'low cost' de una interiorista para renovar tu terraza en otoño
Aunque el verano aún resiste con mañanas soleadas y cenas bajo las estrellas, la naturaleza ya nos regala un espectáculo de ocres, dorados y rojizos.
Es justo en este momento cuando la interiorista María del Valle (@mariadelvalle_interiorismo) propone una transición suave y armoniosa que convierte cualquier rincón exterior en un refugio cálido y funcional. “El secreto está en ir jugando con los accesorios, adaptando objetos textiles y colores a medida que la estación cambia. No hacen falta reformas, basta con detalles que marquen la diferencia”, asegura.
La clave de los textiles: vestir el espacio con colores otoñales
Durante el verano, las tonalidades claras (blancos, azules suaves y verdes luminosos) dominan los ambientes exteriores, evocando frescura mediterránea. Sin embargo, con la llegada del otoño, la recomendación es introducir gamas más cálidas y profundas: terracotas, mostazas, burdeos y beige tostados.
El cambio no tiene por qué ser radical. Basta con sustituir cojines, mantas o cortinas por versiones en tejidos como lana, algodón grueso o terciopelo en zonas protegidas.
Cómo lograr una terraza otoñal paso a paso
Estos textiles no solo aportan confort, sino también una sensación envolvente que invita a pasar más tiempo al aire libre.
Colores que abrigan el ambiente
Introduce cojines en burdeos, mantas -color mostaza o beige a poder ser- alfombras en tonos tierra. Para acompañar, añade plantas de temporada como crisantemos o caléndulas que aportan vida y color.
Iluminación envolvente
Con los días más cortos, la luz se convierte en protagonista. Las guirnaldas con bombillas cálidas, faroles metálicos o velas aromáticas son ideales para recrear atmósferas íntimas y acogedoras al caer la tarde.
Una terraza con luz envolvente/ CANVA
Mantas y cojines extra
Superponer distintos textiles es la clave del estilo cozy. Una manta de lana gruesa sobre un sillón de ratán o cojines de terciopelo sobre bancos de madera aportan un aire sofisticado y práctico a la vez.
Naturaleza decorativa
Las hojas secas, piñas, ramas y calabazas son perfectas para centros de mesa improvisados o rincones rústicos. No hace falta comprarlas, muchas se pueden recolectar en paseos por el campo o el parque.
Decoración de otoño/ CANVA
Muebles confortables
Revisa los asientos y agrega cojines mullidos. Si cuentas con espacio, un sillón colgante o un banco con almacenaje pueden ser aliados funcionales y estéticos.
Plantas de temporada
Crisantemos, pensamientos y violas en macetas estratégicamente colocadas crean un entorno vivo y colorido que marca la diferencia entre un exterior apagado y uno vibrante.
Alfombras resistentes
Una alfombra de exterior, además de abrigar el suelo, ayuda a delimitar zonas de uso: un espacio para comer, otro para descansar, o incluso un rincón de lectura.
El encanto del fuego
Si el espacio lo permite, una hoguera portátil o una chimenea de bioetanol añade calidez y prolonga las veladas otoñales. Además, aporta un punto escénico y decorativo.
Protección solar e intimidad
Aunque el verano haya terminado, el sol otoñal puede ser intenso. Mantener el toldo instalado ofrece flexibilidad y también mayor privacidad frente a vecinos cercanos.
Detalles temáticos
Calabazas decorativas pintadas en tonos neutros, guirnaldas de hojas secas o faroles de hierro envejecido completan la atmósfera otoñal con personalidad y estilo.
Otoño: una estación para reconectar con el hogar
Lo que más destaca de esta propuesta es que la decoración estacional no depende de grandes gastos. Con cambios puntuales y accesorios asequibles, es posible transformar por completo un espacio y hacerlo sentir nuevo. Además, seguir el ritmo de las estaciones es una manera de conectar emocionalmente con nuestro entorno.
Como explica la interiorista, “decorar no es solo embellecer, también es vivir el presente y sentir cómo nuestro hogar evoluciona con nosotros”. En otoño, esto se traduce en crear exteriores acogedores que invitan a compartir charlas con amigos, leer un libro bajo una manta o simplemente disfrutar de un café caliente al aire libre.
Ideas extra para personalizar tu terraza
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Toques aromáticos: Introduce velas de canela, incienso de cedro o ramas de eucalipto en jarrones. El aroma completa la experiencia sensorial.
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Pequeños DIY: Pinta calabazas en tonos mate para integrarlas en la decoración o crea centros de mesa con tarros de cristal y hojas secas.
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Capas en la mesa: Manteles de lino, caminos de mesa de algodón y vajillas en cerámica esmaltada crean composiciones cálidas para comidas otoñales.
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Rincones versátiles: Coloca un baúl de mimbre que sirva tanto para guardar mantas como de asiento extra cuando tengas visitas.
Una estación para seguir disfrutando
El otoño no debe interpretarse como el final de los momentos al aire libre, sino como una oportunidad para redescubrirlos bajo una nueva atmósfera. Con luz cálida, texturas mullidas y colores que evocan la naturaleza, los espacios exteriores se convierten en auténticos refugios de bienestar.
Y lo mejor, lograrlo estar al alcance de cualquiera. Con el truco low cost de apostar por accesorios textiles y detalles estacionales, tu terraza puede transformarse en cuestión de horas. Al final, decorar también es una forma de cuidarnos y de prolongar la sensación de hogar, incluso más allá de las cuatro paredes.