En un universo donde lo natural vuelve a imponerse sobre el exceso, la nueva definición de piel ideal no tiene que ver con el maquillaje ni con la genética privilegiada. Hoy, el verdadero objeto de deseo es una piel que respire salud, frescura y luz propia. En otras palabras: la glass skin. Un concepto que va mucho más allá de la cosmética tradicional y que ha transformado por completo la manera de cuidar el rostro.
Aunque su nombre evoca cierta fantasía de ciencia ficción —una piel tan perfecta que parece de vidrio—, lo cierto es que esta tendencia es muy real, accesible y, sobre todo, efectiva. Eso sí: no es una solución rápida ni un truco milagroso. La piel efecto cristal se trabaja con rutina, conocimiento y paciencia. Y, como suele pasar en belleza, todo empezó en Corea del Sur.
De Seúl al mundo: el fenómeno piel efecto ‘glass skin’
Todo lo que huela a innovación en skincare tiene un punto en común: su origen asiático. Y la glass skin no es la excepción. Nacida en los rituales de belleza coreanos, esta tendencia pone el foco en lograr un cutis jugoso, uniforme y ultra luminoso. No hablamos de un rostro cubierto de iluminador, sino de una piel tan bien cuidada que brilla sola.
Las mujeres coreanas —y ahora miles de beauty lovers en Europa y Estados Unidos— han convertido esta meta en una filosofía de cuidado integral. Porque conseguir una piel translúcida requiere mucho más que aplicar cremas caras: se trata de reeducar la piel desde dentro y tratarla como el órgano vivo que es.
Cómo conseguir la piel de las coreanas y su efecto ‘glass skin’
El proceso implica limpiar con delicadeza, pero a conciencia, elegir fórmulas hidratantes que se absorban en capas sucesivas y, por supuesto, evitar agresores externos como el alcohol, el tabaco o el exceso de cafeína. También influye una alimentación rica en agua, ácidos grasos saludables y antioxidantes. Es un todo.
@izzyutterson I'm 28 btw #fyp @La Roche-Posay #skincare ♬ original sound - ℳ
Quienes han alcanzado este nivel de perfección cutánea lo saben: no se trata de tener buena piel, sino de trabajarla a diario. El secreto está en ser constante y seguir una rutina minimalista pero eficaz: limpieza suave, tónico equilibrante, sérum hidratante, crema calmante y, por supuesto, protección solar a diario.
Pero para potenciar aún más los resultados, hay un nuevo aliado nocturno que se ha ganado el corazón —y los vídeos virales— de miles de usuarias: el slathering.
'Slathering': la tendencia nocturna que regenera mientras duermes
Si te enamoraste del slugging, prepárate para su evolución más sofisticada. El slathering es un tratamiento nocturno que consiste en aplicar una capa generosa de crema ultra nutritiva como último paso de tu rutina.
@amykoberling That after though… #slugging #sluggingmethod @peachandlilyofficial #peachandlily #GlassSkinGoals ♬ Believe Me - Navos
Actúa como una mascarilla reparadora que trabaja durante las horas de sueño, momento en el que la piel se regenera con mayor eficacia. Un producto ideal es el Cicaplast Baume B5+ de La Roche Posay por su potente efecto calmante y reparador.
La diferencia es clave en el tipo de producto utilizado: si en la otra técnica se usaba la vaselina u oclusivos simples, aquí se recurre a fórmulas con ingredientes activos, pensadas para calmar, restaurar la barrera cutánea y retener la hidratación sin saturar la piel.
A continuación te dejamos otro esencial para hacerte un correcto slathering sin riesgo de levantarte con ningún granito traicionero, la Cicalfate Crème Réparatice de Aven te ayudará a regenerar tu piel mientras duermes.
¿El resultado de aplicar este tipo de cremas que te recomendamos? Al despertar, notarás una mejora en la textura, el tono y la elasticidad del rostro. La piel aparece más firme, visiblemente más nutrida y con ese glow natural tan codiciado.
¿Cómo se aplica el ‘slathering’ correctamente?
Tras realizar una doble limpieza y aplicar tu tratamiento habitual (sérum, contorno, hidratante ligera), añade una capa espesa de crema densa y reparadora. Déjala actuar toda la noche. No es necesario retirarla, ya que se absorbe progresivamente. Es importante que el producto elegido tenga una buena tolerancia cutánea, especialmente si tu piel es sensible o reactiva.
Eso sí, si tienes tendencia acneica, exceso de sebo o poros congestionados, opta por versiones más ligeras y no comedogénicas. No todas las pieles aceptan las mismas texturas, y en skincare lo que triunfa es lo que realmente se adapta a ti y no el que se hace viral en redes.
Qué crema usar si tienes piel grasa para el 'slathering' : La 345 Relief Cream de Dr. Althea
Para iniciarte en este ritual nocturno, hay una crema que destaca entre las favoritas de las expertas en belleza: la 345 Relief Cream de Dr. Althea. Considerada una joya de la cosmética coreana, ha sido diseñada específicamente para calmar rojeces, tratar brotes de granitos y reparar la barrera cutánea ante un problema específico de la dermis.
Su textura tipo gel-bálsamo la convierte en una opción versátil: se absorbe fácilmente, no engrasa y deja un acabado suave, sin brillos indeseados.
Es ideal para pieles con tendencia a la sensibilidad, irritación o que estén atravesando tratamientos con ácidos o retinoides (también es ideal para reparar la piel después de un tratamiento láser o cosmético para eliminar las marquitas o manchas faciales por acné). Y lo mejor es que tiene un precio accesible (menos de 30 euros) y está disponible en tiendas online como Amazon.
@noelia_cadenas_ ¿La mejor crema coreana para pieles sensible con acné?✨😮💨 La 345 Relief Cream de @dr.althea_official será tu mejor amiga☺️🌸 Puedes encontrarla en YesStyle✨ te dejo mu código para un descuento extra NOELIACF8☺️💖 @dr.althea_es #cremahidratante #cremahidratantecoreana #acne #pielsensible #acnetreatment #granos #pielsana #pielbonita #barreradelapiel #barreracutanea #barreracutaneadañada #skincaretips #SkinCare #creatorsearchinsights ♬ sonido original - Noelia Cadenas
El secreto de su eficacia está en su fórmula limpia y bien pensada: ingredientes vegetales, agentes calmantes y una acción profundamente reparadora que actúa sin agredir la piel.