¿Cuántos patinetes eléctricos hay en España y cuál es el conductor tipo?

En nuestro país más de siete millones y medio de personas tienen un patinete eléctrico, lo que equivale a unos tres millones de hogares con un ejemplar como mínimo

Dos personas con patinetes eléctricos / FREEPIK
Dos personas con patinetes eléctricos / FREEPIK

Los patinetes eléctricos se han convertido en una pieza clave de la movilidad urbana en España. Además de ser un medio de transporte tan popular como polémico, estos vehículos son una alternativa ágil para evitar atascos y reducir los tiempos de desplazamiento. 

Su popularidad no solo ha cambiado la forma en la que muchas personas se desplazan, también ha generado retos en materia de seguridad vial, regulación y convivencia con otros medios de transporte. Tras múltiples incidentes con estos aparatos, la mayoría de ciudades españolas han implementado normativas para regular su uso. 

Número de patinetes eléctricos en España 

En España, más de siete millones y medio de personas poseen un patinete eléctrico. Esto quiere decir que unos tres millones de hogares cuentan con uno de estos vehículos, como mínimo. Así lo reflejan los datos de la Federación Española de Vehículos de Movilidad Personal (FEVEMP).

Una persona en patinete eléctrico / FREEPIK
Una persona en patinete eléctrico / FREEPIK

En cuanto al perfil del conductor, las mujeres (51,6%) usan más que los hombres (48,4%) los patinetes eléctricos. Además, las cifras sobre el perfil demográfico apuntan a que el 30% de los extranjeros los utilizan como medio de transporte para ir a trabajar o para acudir a centros de estudio. 

Normativa y usos permitidos

Los patinetes eléctricos alcanzan velocidades de hasta 25 km/h, convirtiéndose en una opción ágil para desplazamientos cortos. Sin embargo, para garantizar la seguridad de peatones y conductores, su uso está sujeto a estrictas regulaciones.

Está permitido circular con patinetes eléctricos por carriles bici y calzadas, aunque conviene revisar las normativas locales. No obstante, queda completamente prohibido usarlos en aceras, pasos de peatones, autovías y autopistas.