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Esto es lo que hacen a tu cuerpo las pastillas de vitamina D3 que ya venden los supermercados
Los especialistas coinciden en que es una sustancia relativamente segura, pero recomiendan no consumir estos complementos vitamínicos a la ligera
El sol es la fuente más importante de vitamina D3. Sin embargo, en una sociedad que cada vez tiene menos tiempo libre y que trabaja encerrada, mayoritariamente, en oficinas, disfrutar de luz solar puede ser casi imposible. Por eso, muchas marcas comercializan complementos con vitamina D3 y los supermercados también se han sumado a esta moda. Pero, ¿qué efectos en el cuerpo tienen estas pastillas?
Los Beatles cantaron Here comes the sun and I say it’s alright, glosando sus beneficios sencillos, su calidez grácil, su paz. Pero eso no significa que la luz sea necesaria en la misma medida para todo el mundo ni que estos compuestos sean la panacea. Al igual que la salud de los no celíacos no mejora tomando productos sin gluten, en ocasiones estos suplementos no generan grandes beneficios.
La vitamina D3 puede afectar a las reservas de magnesio
La nutricionista Andrea Calderón, profesora de Nutrición Humana y Dietética en la Universidad Europea de Madrid (UEM) y miembro de la Junta Directiva de la Sedca (Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación), explica que los complementos de vitamina D son, por lo general, inocuos, pero que tomarlos indiscriminadamente puede ser contraproducente.
“Hay gente que se puede tomar dos pastillas diarias porque puede llegar a creer que es mejor, y hay que tener mucho cuidado: los nutrientes crean sinergias, y la vitamina D necesita magnesio para metabolizarse”. Así, si una persona está baja de magnesio y se excede con este extra porque, de forma errónea, cree que le viene bien, puede empeorar el estado de salud en vez de mejorarlo.
Complementos que cuestan entre 4 y 12 euros
Las cajas de comprimidos se pueden encontrar tanto en supermercados como en herbolarios o farmacias. En El Corte Inglés, por ejemplo, el bote de 50 unidades de caramelos de goma de la marca Weider cuesta 9,99 euros, pero en Mercadona se puede conseguir esta vitamina por 4 euros. Más baratas son las opciones de Naturtierra: el bote de 30 cápsulas cuesta 3,85 euros. Y el frasco de tabletas con este compuesto de Biotech contiene 60 unidades y cuesta 11,90 euros.
En las farmacias online, los precios no son muy diferentes. En PromoFarma, por ejemplo, el bote de Nutriceuticals con el elocuente nombre de D-Sol cuesta 11,40 euros (60 cápsulas). Más allá de los precios, Andrea Calderón considera que estos suplementos siempre deben tomarse “bajo consejo profesional”.
Un extra innecesario para las personas sanas
El doctor Javier Aguilar del Rey, reumatólogo del Hospital Virgen de la Victoria de Málaga, explica a Consumidor Global que la vitamina D es un “modulador de la inmunidad” que está de moda. Como se ha demostrado, puede ayudar a sufrir casos menos graves de Covid-19.
En este sentido, un estudio realizado a principios de año por Científicos del Área de Bioinformática de la Fundación Progreso y Salud probó que la ingesta de fármacos para restituir la vitamina D a aquellas personas a las que le faltaba se vinculaba con una mayor tasa de supervivencia frente al virus. Con todo, Aguilar apunta que “si una persona está sana no tiene por qué tomar este tipo de suplementos”, si bien reconoce que el 50% de la población española tiene déficit de esta vitamina.
Un 85% de esta vitamina viene directamente del sol
De la misma manera, el doctor Aguilar del Rey explica que las necesidades diarias de esta sustancia varían en función de la edad. Así, en niños y adolescentes serían recomendables unas 600 Unidades Internacionales (UI) diarias. Esta medida, las UI, es la que se utiliza para evaluar la cantidad de sustancias presentes en farmacología. En adultos, la cifra asciende a las 800 UI. En este sentido, Aguilar señala que el yogur Densia de Danone es “el alimento del mercado más fortificado con vitamina D”, con unas 200 UI.
Pero no siempre más es mejor. La boticaria y divulgadora Gemma del Caño, especializada en I+D y en biotecnología, explica a este medio que únicamente el 15 % de la vitamina D diaria se obtiene a través de los alimentos (entre ellos, el huevo, el salmón o las sardinas). El resto, un 85 %, viene directamente del sol. Por eso, la experta recomienda dar pequeños paseos diarios de 15 minutos.
De venta, también, en supermercados y herbolarios
Las cápsulas de Naturtierra a la venta en El Corte Inglés tienen 4.000 UI y el producto que vende Mercadona contiene 2.000 UI. En el reverso el fabricante indica que la dosis diaria recomendada es de un comprimido, y que antes de su uso se recomienda hacerse un análisis de sangre. A pesar de las indicaciones, el doctor Aguilar considera que los suplementos a la venta en otros establecimientos que no sean farmacias pasan “controles menos estrictos”.
De hecho, señala que ha visto casos de toxicidad producida por productos de vitamina D comprados en herbolarios. En este sentido, Gemma del Caño recuerda que “si bien un déficit provoca problemas, un exceso no los mejora” y concluye que “tomar estas pastillas sin prescripción médica puede ser un error”.
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