Seur desquicia a sus clientes por los retrasos y las "mentiras" en las entregas de los paquetes

Pedir por internet y que llegue a casa es la nueva forma de comprar del siglo XXI. Con tan solo un clic, el producto deseado ya está en camino. No importa si es comida, ropa, tecnología o cualquier otro tipo de categoría. En la actualidad, es posible adquirir sin moverse del sofá casi cualquier cosa que se pueda imaginar. 

Las empresas de reparto son las piezas fundamentales en este proceso. Las calles de las ciudades están repletas de furgonetas y repartidores cuyo volumen de trabajo crece a marchas forzadas. Sin embargo, estas compañías no siempre están a la altura. A veces, los paquetes no consiguen llegar a tiempo. Unos retrasos que acaban con la paciencia de los usuarios. 

"Son un desastre de empresa"

Muchos son los internautas que aseguran que los pedidos nunca llegan en el día y en la hora prometidas con Seur. Tampoco escasean las críticas que apuntan que los repartidores mienten. Son los casos de Ángel y Mayte L. Ninguno de estos usuarios han quedado satisfechos con los servicios de la empresa de transporte. "Son un desastre de empresa", resume el primero. 

A este afectado, la compañía le indicó que un repartidor pasaría a recoger el paquete en horario de mañana. Algo que nunca ocurrió: "Cuando llamas a atención al cliente, además tienen la desfachatez de decir que ‘se han pasado por mi casa y no estaba’. He estado pendiente de la puerta todo el rato. Unos impresentables", relata Ángel. 

¿Por qué se producen los retrasos?

Juan José Montiel, profesor de OBS Business School, explica a Consumidor Global el porqué se producen retrasos en las empresas de transporte. Es un conjunto de factores lo que provocan las demoras. "Te cargas de tantas entregas como puedas o como crees que vas a poder. Ahí hay siempre una tensión entre la empresa y los repartidores", explica el experto.

Un atasco, un retraso al recibir la mercancía o las zonas donde no pueden estacionar las furgonetas son solo algunos de los motivos que producen retrasos. "A veces es culpa del repartidor que asume demasiadas entregas, otras veces es la empresa que le asigna demasiadas. Ahí tenemos una casuística muy variada", añade Montiel. 

"Mentirosos e impresentables"

"Mentirosos e impresentables" son los dos adjetivos con los que Mayte L. califica a Seur. "Dicen que intentan la entrega cuando es mentira. A la segunda intentona dicen que ‘no es posible acceder al punto de entrega’. ¿Perdón? Es perfectamente posible", relata. La internauta asegura que tras el hartazgo, ha decidido establecer un punto de entrega para poder ir a recogerla ella misma. 

"Tampoco envían el SMS para la recogida", detalla. Según explica esta clienta, no hay forma de localizar el paquete: "La aplicación dice que se entregará en el punto de recogida pero si haces seguimiento telefónico dice que está entregado y si usas el chat no reconoce el código", zanja.  

Pagar más por el envío, ¿es la solución?

Los estados de los pedidos los actualiza el repartidor. Así lo afirma Montiel. Esto podría explicar los supuestos intentos de entrega de Seur. Una cuestión donde entra la picaresca del trabajador. El problema y el caos que suelen producirse en las empresas de transporte deriva, en parte, de los precios. "Nadie quiere pagar el transporte", afirma el experto. 

"¿Comprendes que se puede pagar tres euros por llevar un paquete desde Madrid a Alicante, a Almería o a Huelva? Es imposible", añade. Si se subiera el precio de los costes de envío, habría más posibilidades de reducir los retrasos de entrega, según explica el experto. Pero, a su juicio, el problema es que "nadie quiere que le toquen el bolsillo". El profesor de OBS Business School pone el foco, además, en la subida de precios en combustibles. "Es un círculo vicioso y un problema que no asume nadie", concluye.

¿A quién hay que reclamar?

Cuando una persona pide un producto, este debe ser entregado en un plazo de 30 días naturales. Así lo explica Montiel. Si no se cumple con el plazo, el cliente tiene derecho a exigir el reembolso del producto o que le envíen exactamente el mismo. No obstante, es evidente que los paquetes también se extravían. Casos como el de Mayte L. es una prueba de ello. 

Cuando ocurre, no queda muy claro sobre quién recae la responsabilidad. Montiel aclara esta cuestión: "Tú eliges a quién le compras, no eliges el transporte y, por lo tanto, tienes que reclamarle al que te ha vendido el producto", expone. Casos como el de esta clienta o el de Ángel con Seur coinciden con el de otros usuarios. Consumidor Global ha intentado ponerse en contacto con la compañía pero esta guarda silencio. La empresa de transporte ha conseguido acabar con la paciencia de este grupo de clientes. Un colectivo decepcionado cuya experiencia ha sido pésima.