El truco de las abuelas españolas para preparar las mejores torrijas en Semana Santa
¿Las torrijas no te quedan igual que las de tu abuela? En Consumidor Global te revelamos los mejores consejos y trucos para conseguir que este delicioso postre tradicional te quede jugoso esta Semana Santa

Las torrijas son, sin duda, uno de los dulces más representativos de la gastronomía española durante la Cuaresma y la Semana Santa. Este postre, que ha pasado de generación en generación, se elabora y consume en todo el país, tanto en hogares como en pastelerías y restaurantes de lo más gourmet.

Aunque puede parecer sencillo de preparar, lograr unas torrijas perfectas requiere conocer ciertos trucos y técnicas de las cocineras de toda la vida: las abuelas. A continuación, exploramos las mejores recomendaciones para que este dulce quede tan jugoso y aromático como el que te comías en tu infancia, así como para conseguir una textura inigualable.
Las torrijas: un postre tradicional de la Semana Santa
Este tradicional postre, con siglos de antigüedad, tiene sus primeras referencias en la obra del gastrónomo romano Apicio, quien en los siglos IV y V recopiló recetas latinas, entre ellas una que consistía en pan empapado en leche. Sin embargo, no fue hasta el siglo XV cuando adquirió su versión actual, incorporando el huevo en su preparación.

A partir del siglo XVII, se documenta su uso como alimento reconstituyente para las mujeres tras el parto. Su vinculación con la Cuaresma y la Semana Santa llegó más tarde, probablemente debido a la necesidad de aprovechar el pan sobrante en épocas de abstinencia de carne.
En el siglo XX, este dulce se convirtió en un clásico de las tabernas madrileñas, donde solía acompañarse con un vaso de chato de vino. Su popularidad traspasa fronteras, ya que existen versiones similares en distintos países europeos, desde Francia hasta Alemania o los Países Bajos.

¿Cuántos tipos de torrijas hay?
A lo largo del tiempo, la receta de las torrijas ha evolucionado y hoy en día existen múltiples versiones que se comercializan en los mejores restaurantes durante todo el año. Entre ellas, encontramos torrijas clásicas de leche, de vino, con almíbar, infusionadas con licor de amaretto o incluso rellenas.

También varían en su método de cocción, ya que pueden ser fritas, horneadas o caramelizadas. Independientemente de la receta que se elija, ciertos principios básicos ayudarán a conseguir un resultado excepcional.
El pan: la base de cualquier buena torrija
El tipo de pan utilizado juega un papel fundamental en la textura de las torrijas. Aunque existen panes especiales diseñados para esta receta, no es imprescindible adquirirlos. Tradicionalmente, como mejor queda este dulce, es usando el pan común duro de barra, no de molde, aprovechando el que ha sobrado de días anteriores en tu casa.

Para obtener un buen resultado, el pan debe ser de calidad, con una corteza fina y una miga densa y poco alveolada, similar al pan candeal. Lo ideal es emplear pan del día anterior o incluso de dos días antes, permitiendo que se seque ligeramente sin endurecerse por completo. Este detalle es crucial, ya que el pan ligeramente seco absorbe mejor la leche y retiene más líquido, lo que da como resultado una torrija más jugosa, pero el que está duro de semanas puede desmigajarse y partirse al mojarlo.
El truco de la abuela para que queden exquisitas
Las torrijas son un postre icónico de la Semana Santa que combina sencillez con un sabor inconfundible a tradición. Aunque su preparación requiere tiempo y atención a los detalles, por ello te contamos cómo lo hacen las abuelas para que el resultado merezca la pena. Esto lo sabe bien la creadora de contenido culinario @paulasapron, cuyo apartado de recetas llamado El delantal de Paula recoge pequeños trucos de su familia con los que ayuda su comunidad de seguidores a conseguir resultados excepcionales en sus recetas, como es el caso de estas torrijas:
@paulasapron Torrijas Tradicionales, no hay nada como un clásico y una vez al año… #torrijas #postresfaciles #recetasfaciles #reposteria #recetatradicional #semanasanta ♬ sonido original - El Delantal de Paula
Rebozado y Fritura: Batir los huevos y cubrir las rebanadas de pan antes de freírlas en abundante aceite caliente. Girarlas para dorarlas de manera uniforme.
Escurrido y Rebozado: Colocar sobre papel absorbente y espolvorear con la mezcla de azúcar y canela.
¿Cómo se fríen las torrijas? ¿Se pueden hacer con Air Fryer?
La elección del aceite influye en el resultado final. Mientras que el aceite de girasol es más neutro, el de oliva aporta un toque característico, quizá demasiado salado y poco aconsejable. Se recomienda mantener el aceite a una temperatura entre 170ºC y 180ºC para evitar que las torrijas absorban demasiado aceite.
Para verificar la temperatura sin termómetro, un truco eficaz es introducir una cáscara de naranja: si chisporrotea, el aceite está listo. Se deben freír de dos en dos para evitar que el aceite pierda calor y utilizar siempre aceite limpio. Si eres de los que prefieren restarle ese plus de calorías con la fritura, también puedes intentar hacerlo con la freidora de aire, tal y como lo explican en el siguiente videotutorial para hacerlas en la freidora de aire.
@laespanolaaceites Quieres hacer TORRIJAS en la FREIDORA DE AIRE? Te enseño cómo hacerlo 😙🥖 #torrijas #torrijascaseras #torrijasdeleche #torrija #torrijasdechocolate #torrijasdelabuela #torrijasdelasbuenas #torrijasdemiel #airfryer #freidoradeaire #freidoradeairereceta #airfryerrecipes ♬ Training Season - Dua Lipa
Consejos para una fritura perfecta
Si no eres una persona muy fitness o simplemente crees que lo mejor es seguir la receta tradicional de toda la vida y darte un capricho culinario, has de saber que uno de los momentos clave en la elaboración de las torrijas es la fritura. Para obtener un resultado óptimo, es fundamental elegir un aceite adecuado con poco sabor (girasol) y controlar su temperatura.
-
Temperatura del aceite: Debe estar bien caliente, pero sin llegar a humear. Para comprobar si está en su punto sin un termómetro, se puede introducir una cáscara de naranja; si chisporrotea, está listo.
-
Cantidad de aceite: Debe ser suficiente para que las torrijas floten y se frían de manera uniforme.
-
Tipo de aceite: Se puede usar aceite de oliva virgen extra para un sabor más intenso o de girasol si se prefiere un resultado más neutro.
-
Freír pocas torrijas a la vez: Para evitar que el aceite pierda temperatura, es recomendable freírlas en tandas de dos o tres unidades.
Cómo servir las torrijas
Una vez fritas, las torrijas pueden servirse de diversas maneras. Aunque algunas recetas ya llevan azúcar en la leche infusionada, lo más común es rebozarlas en azúcar y canela o bañarlas con algún sirope. A continuación te traemos cómo hacer un buen almíbar para torrijas de la mano del creador de contenido @mister_postres, que para sorpresa de sus seguidores hace uno delicioso y sin canela.
@mister_postres Almíbar para torrijas, buenísimas, si queréis ver la receta de torrijas haz click en mi BIO o busca en YouTube Mister Postres, las tengo baja en calorías, normales y mañana las saco de coco
♬ sonido original - Mister Postres
La miel es la opción más tradicional, pero también se pueden preparar almíbares ligeros con agua y azúcar en proporción 1:1, aromatizados con cítricos, vainilla o agua de azahar. Para una presentación más sofisticada, se pueden acompañar con nata montada o incluso frutas frescas. Además, si sobran torrijas, pueden conservarse en la nevera y calentarse ligeramente antes de servirlas para recuperar su textura original.
Receta tradicional de torrijas paso a paso

Siguiendo estos consejos, podrás disfrutar de unas torrijas deliciosas, jugosas y con un sabor tradicional que deleitará a todos.
Ingredientes (20 unidades)
-
20 rebanadas de pan del día anterior
-
1 litro de leche
-
100 g de azúcar
-
1 rama de canela
-
Piel de un limón (sin la parte blanca)
-
2 huevos
-
Abundante aceite de oliva virgen extra o de orujo para freír
-
100 g de azúcar y canela molida para rebozar
-
Preparar la leche infusionada: Calentar la leche junto con el azúcar, la canela y la piel del limón. Antes de que comience a hervir, retirar del fuego y dejar reposar tapado hasta que se enfríe.
-
Cortar el pan en rebanadas: Lo ideal es que tengan un grosor de entre 1,5 y 2 cm para que absorban bien la leche sin desmoronarse.
-
Empapar las rebanadas: Sumergir el pan en la leche infusionada y dejar en remojo durante aproximadamente una hora o hasta que absorban todo el líquido.
-
Rebozar en huevo: Batir los huevos en un bol amplio, pasar las rebanadas por ambas caras y escurrir ligeramente el exceso de huevo.
-
Freír las torrijas: Calentar abundante aceite en una sartén y freír las torrijas hasta que estén doradas por ambos lados. Escurrir sobre papel de cocina para eliminar el exceso de grasa.
-
Rebozar en azúcar y canela: Mezclar el azúcar con la canela molida y cubrir las torrijas aún calientes para que absorban mejor los sabores.