Manuel Royo, directivo de Beko: "Presta atención a las señales de alerta de tus electrodomésticos"
Situar los electrodomésticos alejados de fuentes de calor así como utilizar los productos de limpieza correctos puede ayudar a alargar la vida útil de muchos aparatos

La llegada de la primavera y el verano obliga a los consumidores a poner a punto sus electrodomésticos. Frigoríficos, lavadoras o aires acondicionados trabajan a pleno rendimiento en esta época, por lo que realizar un mantenimiento adecuado puede marcar la diferencia entre un verano tranquilo o uno repleto de averías imprevistas.
Ante este contexto, Manuel Royo, director de Marketing para Iberia de Beko, ha compartido algunas claves para alargar la vida útil de los electrodomésticos. Unos consejos sencillos para mantenerlos en buen estado.
Ubicación y limpieza
El primer truco es no colocar los electrodomésticos cerca de fuentes de calor, en zonas con alta humedad o en espacios sin ventilación. No obstante, se recomienda dejar espacio entre el electrodoméstico y la pared para mejorar la circulación de aire y reducir el riesgo de sobrecalentamiento. Además, siempre que sea posible, el experto aconseja evitar la exposición directa al sol, ya que puede afectar al rendimiento y acortar la vida útil del equipo.

Dedicar tiempo al mantenimiento de filtros, juntas y bobinas es esencial. En frigoríficos, por ejemplo, limpiar las bobinas traseras al menos dos veces al año ayuda a reducir el consumo energético. En lavavajillas, un filtro sucio o dañado puede provocar malos olores, platos mal lavados o acumulación de agua. Además, es recomendable la descalcificación periódica, especialmente en zonas donde el agua es muy dura, ya que mejora el rendimiento general.
Sobrecarga en lavadoras y secadoras
Saber cómo cargar correctamente la lavadora o la secadora es fundamental para alargar la vida útil de las prendas y del propio electrodoméstico. Una sobrecarga impide una limpieza y secado adecuados, y puede generar desequilibrios en el tambor o un mayor desgaste de sus componentes.
También es clave utilizar correctamente los productos de lavado, colocando el suavizante en el compartimento adecuado del cajetín o usando un dosificador si se introduce directamente en el tambor.

Mantenimiento preventivo
Otro truco para alargar la vida útil de los electrodomésticos consiste en prestar atención a las instrucciones del fabricante. Se recomienda realizar revisiones periódicas, que ayudan a detectar posibles fallos antes de que se conviertan en averías.
Los ruidos poco comunes, olores o un funcionamiento irregular pueden ser síntomas claros de un problema técnico. Por ello, no hay que ignorarlos y actuar a tiempo para evitar averías mayores.
Productos de limpieza adecuados
El uso de productos abrasivos pueden dañar la superficie y el acabado de los electrodomésticos. Es mejor optar por productos de limpieza suaves y específicos según el tipo de material, como el acero inoxidable, el cristal, etcétera. Además, siempre es preferible utilizar paños de microfibra, que no dañan ni rayan las superficies.

"Cuidar nuestros electrodomésticos no solo es una cuestión de eficiencia o ahorro, sino también de responsabilidad con el entorno. En Beko, trabajamos constantemente para ofrecer tecnologías que hagan el día a día más fácil, pero también queremos inspirar a los usuarios a adoptar hábitos más sostenibles en casa. Porque cada gesto, por pequeño que parezca, puede marcar una gran diferencia", concluye Royo.