AllZone amenaza con demandar por 80.000 euros a un cliente que tuitea sobre su mala experiencia

Consumidor Global sigue desentrañando el entramado de la empresa fundada por Pablo Moscoloni y da voz a los miles de afectados

Una demanda de AllZone / CG
Una demanda de AllZone / CG

El negocio de vender, desaparecer y luego censurar. Ese parece ser el modelo que, cada vez con menos disimulo, sostiene a AllZone. La tienda, que prometía tecnología de marca a precios de derribo y con entregas exprés, ha terminado dejando tras de sí un reguero de consumidores indignados a causa de los pedidos fantasma, cuentas bloqueadas y, ahora también, amenazas legales.

La historia ya la conocíamos, en parte. Pero con el último capítulo, AllZone ha cruzado un nuevo umbral al exigir silencio, retractación y retirada de las críticas públicas a los perjudicados.

El burofax: una demanda de 80.000 euros

Juan Miguel Valverde, uno de los muchos afectados por las presuntas prácticas fraudulentas de AllZone, ha compartido con Consumidor Global un burofax remitido el pasado viernes 2 de mayo por el despacho Gerez Abogados en nombre de All In Digital Marketing S.L. (la empresa vinculada a AllZone). 

La página de AllZone   CAPTURA
La página de AllZone CAPTURA

En el texto se le exige que retire todas las publicaciones que ha hecho en contra de la empresa, se abstenga de seguir haciéndolo y que publique una rectificación pública. Todo esto bajo la amenaza de una demanda por 80.000 euros más costas judiciales. “Parece mentira que a tan pocos les importe que haya gente que time a tantos conciudadanos, y con una soberbia y cinismo muy fuera de lugar”, lamenta Valverde.

¿De qué se le acusa?

El burofax acusa al excliente de hacer declaraciones “sin sustento probatorio”, califica sus mensajes de “lesivos al honor” y le recuerda, en tono intimidatorio, que estaría incurriendo en delitos de calumnias e injurias si no cesa. Todo muy solemne. Muy legalista. Muy intimidante.

Pero, ¿a qué publicaciones se refiere exactamente la empresa? Valverde asegura que jamás ha compartido datos sensibles, como números de pedido o información que lo identificara de forma directa como cliente. Bajo el alias @mezztiso en X, se ha limitado a difundir reseñas públicas de Trustpilot, visibilizar la situación de otros afectados y enlazar reportajes publicados por Consumidor Global. Todo el contenido que ha compartido puede ser verificado y ha sido comprobado por este medio.

Una amenaza por exponer una mala experiencia

Llegados a este punto, cabe hacerse una pregunta incómoda. ¿Está AllZone persiguiendo judicialmente a quienes han sufrido su pésimo (y presuntamente fraudulento) servicio, simplemente por contarlo?

Consumidor Global ya ha documentado 1.197 testimonios de afectados, muchos de ellos con pérdidas de cientos o miles de euros. Usuarios que no recibieron sus pedidos, que vieron su dinero retenido durante semanas o meses sin respuesta, y que luego fueron silenciados en redes. AllZone ha bloqueado comentarios y borrado críticas en Instagram y otras redes sociales.

El patrón se repite

Para su director ejecutivo, Pablo Sebastián Moscoloni, no es un modelo de negocio nuevo. Como ya informó este medio, el CEO de AllZone ha estado asociado a empresas anteriores como The Geekland S.C. (Just Deal), Spain On Line S.L. y Systems And Phones Net Moviles S.L., las cuales también enfrentaron denuncias por prácticas similares, incluyendo sanciones por infracciones en protección de datos y cláusulas abusivas.

Las quejas contra AllZone siguen siendo el pan de cada día, y la reputación de la compañía parece estar en una pendiente resbaladiza. ¿Será este el momento en el que la tienda se vea obligada a dar un paso atrás, asumir sus errores y responder por su mala praxis? O, por el contrario, ¿seguirá utilizando las amenazas legales como escudo para protegerse de las críticas legítimas de los consumidores?

La versión de AllZone

Por su parte, la empresa All In Digital Marketing S.L., responsable de la tienda AllZone, ha ofrecido su versión de los hechos y defiende que el cliente en cuestión, Juan Miguel Valverde, canceló voluntariamente su pedido dentro del plazo estipulado y recibió el reembolso correspondiente conforme a sus políticas de cancelación. 

El CEO de AllZone Pablo Moscoloni / LINKEDIN - CG
El CEO de AllZone Pablo Moscoloni / LINKEDIN - CG

Según la compañía, la posterior exigencia de una devolución por el doble del importe no tenía fundamento, y desde entonces, Valverde habría iniciado “una campaña sistemática de desprestigio con acusaciones reiteradas en redes sociales y plataformas de reseñas, algunas de las cuales fueron retiradas por incumplir las normas de uso”.

“Difamación sistemática”

La empresa afirma haber intentado contactar en varias ocasiones con el afectado para resolver la situación de forma dialogada, sin éxito, y asegura estar abierta a alcanzar una solución amistosa. No obstante, considera que los mensajes publicados exceden el derecho legítimo a compartir una experiencia de consumo y se enmarcan en lo que califican como “difamación sistemática”. 

Por ello, han iniciado un proceso de asesoramiento legal con el despacho Cremades & Calvo-Sotelo para estudiar posibles acciones legales en defensa de su reputación. “Queremos ofrecer una visión objetiva, justa y equilibrada de lo sucedido”, concluyen desde AllZone.