Ni Ikea ni Leroy Merlin: Lidl saca a la venta un accesorio para el baño que promete utilidad y orden
En Consumidor Global te traemos los mejores accesorios de baño de Lidl para renovar tu espacio con estilo y poco presupuesto: descubre la estantería top ventas de la cadena de supermercados que todo el mundo quiere tener en su baño
En la decoración contemporánea, pocas estancias han experimentado una transformación tan sorprendente como el baño. Lejos de ser un espacio meramente funcional, hoy se ha convertido en un pequeño santuario doméstico donde comenzamos el día con energía y lo despedimos con calma gracias a nuestra rutina de skincare.
La iluminación, los colores y, sobre todo, los accesorios adecuados son los responsables de ese ambiente de serenidad que tanto buscamos. Y es que, cuando cada elemento tiene su lugar y su propósito, el baño deja de ser un rincón secundario para convertirse en una extensión natural de nuestro bienestar.
Lidl y su accesorio para el baño con diseño y precio accesible
En esta revolución silenciosa de los espacios íntimos, los accesorios decorativos de Lidl se han ganado un hueco entre los amantes de los interiores cuidados. Lo que antes parecía exclusivo de tiendas especializadas como Ikea o Leroy Merlin, ahora se encuentra en el supermercado de toda la vida, y con un diseño sorprendentemente atractivo. Sus propuestas combinan estética y practicidad, demostrando que no hace falta invertir una gran suma de dinero para conseguir un baño bonito, organizado y con personalidad.
Uno de los productos que más está llamando la atención son sus estanterías para baño, piezas de líneas limpias, estructura ligera y un acabado moderno que encaja prácticamente en cualquier estilo. La propuesta decorativa de Lidl incluye desde pequeños colgadores hasta baldas más amplias donde colocar toallas (como las que también venden por solo 11,99 euros), neceseres o aquellos detalles que hacen más fácil el día a día de nuestra rutina de belleza (como el rodillo facial de cuarzo que también se puede adquirir en sus lineales a 12,99 euros).
La estantería también permite colocar dispensadores de jabón, portacepillos, tarros de almacenamiento e incluso un coqueto espejo de maquillaje con acabado metálico. Todo está pensado para que quepa en sus baldas y aportar funcionalidad sin renunciar a una estética cuidada.
Estanterías que ordenan y decoran por solo 14 euros
Entre las propuestas de Lidl destaca especialmente este modelo en metal negro, un tono que aporta un aire sofisticado y se integra sin dificultad tanto en baños minimalistas como en aquellos de estilo más rústico o industrial.
Su diseño aprovecha al máximo cada centímetro y facilita dividir los productos por categorías: un estante para el cuidado corporal, otro para el facial y los restantes para herramientas como la plancha del pelo o incluso una repisa al más puro estilo revistero para colocar ahí tus lecturas cuando tienes que usar el excusado.
Su ligereza es otro de sus grandes aciertos: pesa muy poco, se limpia sin esfuerzo con un paño húmedo —es de acero inoxidable— y puede moverse fácilmente cuando toca repasar el suelo. Si, por el contrario, buscas un organizador que ocupe menos espacio, Lidl también propone una estantería más pequeña y alargada a lo alto de plástico estético negro.
Mientras Ikea y Leroy Merlin ofrecen alternativas similares por alrededor de 40 euros, Lidl sorprende con un precio casi simbólico: 13,99 y 9,99 euros respectivamente, lo que las convierte en opciones más competitivas en el mercado.
El otro estante idóneo para el baño con un precio más elevado es este de Ikea, muy similar en aspecto a las de Lidl, pero con un precio que lo cuadriplica costando casi 50 euros.
Lidl apuesta por nuestro baño con productos económicos y estéticos
En sus baldas tengo desde los productos de uso diario —cremas, sérums y tónicos— hasta las reposiciones de champú y gel. Como suelo tener problemas con la humedad, prefiero mantenerlo todo a la vista. Guardar los productos en un cajón cerrado a veces es peor opción, y esta estructura me permite tenerlo todo ventilado y accesible sin sacrificar la armonía del ambiente.
En mi caso, mi baño no destaca precisamente por su amplitud. Sin embargo, desde que incorporé una estantería de estilo similar a las que ahora ofrece Lidl, la sensación de espacio ha cambiado por completo. Es sorprendente como un mueble bien elegido puede multiplicar el orden.
Un dispensador multifuncional para olvidarte de botes
A este mueble se suma otro accesorio estrella de la cadena alemana de supermercados: un dispensador de jabón multifuncional. Fabricado en plástico negro, a juego con la estantería que te proponemos, este además posee un sensor de movimiento para un manejo higiénico y sin contacto. Adecuado para jabón líquido, es muy fácil de rellenar gracias a su compartimento/depósito. Por solo 8,99 euros.
Otra propuesta de Lidl es la de su dispensador de pasta de dientes. Tiene espacio para cuatro cepillos de dientes y un compartimento adicional donde guardar seda dental o accesorios de higiene bucal. Para quienes son muy exigentes con la limpieza, incorpora un sistema desmontable que facilita su mantenimiento.
¿Lo mejor? Se fija a la pared mediante una lámina adhesiva, sin necesidad de taladrar ni usar herramientas. Un detalle que marca la diferencia en baños pequeños, en paredes delicadas o en viviendas de alquiler.
Grifería en negro mate: el toque premium
Para completar el conjunto, Lidl recomienda —a juego con su estantería— un grifo monomando en negro mate, firmado por Schütte, que aporta un toque de sofisticación al lavabo o la ducha. Su diseño silencioso y de marcha suave permite controlar con precisión el caudal y la temperatura del agua.
Incluye cartucho con sellos cerámicos duraderos, es apto para calentadores instantáneos y viene acompañado de todo el kit de montaje y las instrucciones necesarias. Todo ello por 45,99 euros, un precio muy atractivo para un grifo de estética contemporánea y acabado premium.
Un espejo funcional y coqueto
Y para los amantes del detalle, nada como un buen espejo de maquillaje. El modelo de Ridder, también disponible en Lidl, destaca por su base antideslizante y su pequeño espacio de almacenamiento donde dejar joyas, pinzas o incluso el perfume que usamos a diario.
Su doble cara permite alternar entre visión normal y aumento con un simple giro de 180°, convirtiéndolo en un accesorio práctico y encantador. Su precio es igualmente accesible: 9,99 euros.
Con propuestas así, no sorprende que los baños hayan pasado de ser espacios discretos a convertirse en rincones llenos de estilo. A veces, bastan unos cuantos accesorios bien escogidos para transformar por completo la cotidianidad y regalarnos un momento de lujo diario. Si alguna vez has pensado que tu baño necesitaba un cambio, quizá la respuesta no esté en una reforma, sino en esas piezas accesibles que aportan orden, belleza y un toque de inspiración.