La jugarreta de un anfitrión de Booking
Una pareja reservó un piso en Roma a través de la agencia por el que pagaron 250 euros y al que nunca llegaron a acceder
Aunque Booking es una de las agencias online de viajes más populares del mundo, algunos alojamientos anunciados en la plataforma son objeto de críticas. No es para menos, teniendo en cuenta la actitud de algunos de ellos.
El caso más reciente que ha recogido Consumidor Global afecta a una pareja que reservó por Booking un apartamento en Roma que costó 250 euros. La estancia estaba planificada del 6 al 11 de marzo pero, por culpa del anfitrión, nunca llegaron a acceder a la vivienda y perdieron la mayor parte del dinero.
No se trataba de una estafa sino de un anfitrión muy terco. Este le comunicó a la pareja que debían realizar el check in entras las dos y la seis de la tarde de ese 6 de marzo. Pero los afectados le explicaron que, debido a los horarios del vuelo, no llegaban a tiempo.
Por su parte, el anfitrión les recalcó que el horario era inflexible así que la pareja decidió alquilar otro alojamiento para pasar la primera noche y así poder cumplir con el horario del check in al día siguiente. Una solución que no aceptó el propietario, quien insistía que la entrada debía realizarse el 6 de marzo.
La pareja acudió desesperada a Booking y la agencia se limitó a mediar entre ambas partes sin éxito alguno. Fueron los propios afectados quienes tuvieron que buscar a contrarreloj un alojamiento por culpa de la terquedad del anfitrión perdiendo la mayor parte del dinero.
