Comemos más huevos, pero menos pescado fresco: qué entra y qué sale de la cesta de la compra
En un contexto de inflación moderada, los españoles han aumentado un 8% la adquisición de huevos y un 4,9% la de carne, según un estudio
Seguir una dieta variada y equilibrada es fundamental para mantener una buena salud. Hacerlo asegura el aporte de todos los nutrientes, reduce el riesgo de padecer enfermedades, favorece la salud intestinal y, además, evita la monotonía y el aburrimiento. Sin embargo, la actual caída del poder adquisitivo puede tener un impacto significativo en la calidad de la dieta de los consumidores, y está demostrado que las prevalencias de sobrepeso y obesidad aumentan en los niños de los hogares de familias más vulnerables.
Según un análisis de NIQ, el gasto de los hogares españoles en gran consumo creció un 4,6% anual en 2024, lo que significa que las familias dedican 500 euros más a la cesta de la compra que en 2022, año en el que comenzó la escalada inflacionista.
Cae el pescado fresco
Este estudio refleja que prácticamente todas las categorías de productos incrementan su demanda, tanto en la sección de envasados como en los productos frescos, a excepción del pescado fresco, que continúa en negativo (-5,6%).

En este sentido, Fedepesca, la patronal de las pescaderías españolas, estima que en la última década el consumo de pescado fresco ha caído un alarmante 34%, lo que significa una caída de 4,19 kilos por persona y año. “El pescado congelado tampoco se salva de esta caída del consumo, pasando de 3,1 kilos por persona y año a 1,98 kilos en diez año”, alerta la entidad.
Más carne y huevos
En el estudio de NIQ destaca el incremento del 8% en los huevos; del 4,9% en la carne; del 3,4% en los refrigerados, la misma subida que para perfumería; y del 3,1% para la sección de droguería.
A la hora de comprar, en 2024 los consumidores se guiaron por la "racionalización" y por buscar "activamente" promociones. Dentro de ese proceso de mayor racionalización se incluye un incremento de la frecuencia de compra (+3%) pero con cestas más pequeñas.

Presencia de los frescos
Según el Observatorio de Productos Frescos publicado por Aldi el pasado mes de mayo, los productos frescos representan el 43% del gasto anual en alimentación de los españoles.
En 2023, las frutas y verduras fueron los frescos a los que más presencia (63%) y más gasto (35%) se dedicó en la cesta de la compra. El supermercado alemán estimó entonces que los hogares españoles destinaron 726 euros al año de media en la compra de frutas, verduras y hortalizas. En comparación, invertían hasta 557 euros anuales en su presupuesto en carne fresca, 312 en charcutería y 128 en pan fresco.

Crece el consumo de proximidad
Además, el comercio de proximidad gana peso, ante lo que se observa un aumento de las ventas del 5% en los supermercados, con gran peso de los establecimientos regionales, frente a la caída de un 2% de los hipermercados.
Aldi, Consum y Eroski lideran el ranking de cantidad de tickets por cliente, que han sido capaces de compatibilizar con un crecimiento del número de establecimientos.
Consumidores vulnerables
El 39% de los consumidores en España asegura sentirse vulnerable en materia de alimentación, sobre todo como consecuencia del contexto de inflación y el alza de precios, lo que supone un aumento del 6% respecto a 2023. Así lo revelan los datos de la Encuesta de Hábitos de Compra y Consumo 2024 realizada por la Mesa de Participación de Asociaciones de Consumidores (MPAC) y Mercadona.
En concreto, según dicho informe, que analiza desde hace 10 años el comportamiento del consumidor medio en España, del 39% de los encuestados que afirma sentirse vulnerable. El 23% lo hace porque su nivel de renta es bajo, lo que supone un aumento del 4% en comparación con 2023.

