Adiós al mal olor de tus zapatos: "Solo necesitas un saquito de té y un poco de bicarbonato"
Descubre cómo quitar la humedad y el mal olor de tus zapatos con métodos caseros y naturales. Bolsitas de té, bicarbonato, vinagre y otros trucos para mantener tu calzado fresco y en buen estado por más tiempo

Un buen par de zapatos puede acompañarte durante años… siempre y cuando sepas cuidarlo. Uno de los mayores enemigos de su vida útil es la humedad, no solo favorece el mal olor, también puede deformar su estructura y deteriorar materiales como el cuero o la gamuza, dejándolos irreparables.
Si vives en una zona húmeda o sueles sudar mucho de pies, es fundamental tomar precauciones. Además de una correcta ventilación, puedes recurrir a productos como sprays antihumedad, siempre aplicándolos a unos 20 centímetros de distancia y en la cantidad justa para no dañar el material. Eso sí: no basta con usarlos una vez. Repítelo cuando notes que el calzado vuelve a necesitarlo; la frecuencia dependerá del clima y de cuánto se mojen tus zapatos.
Causas del mal olor de pies
El mal olor de pies puede tener diversas causas, muchas de ellas relacionadas con factores internos y externos. Las alteraciones hormonales, como las que ocurren durante la adolescencia, el embarazo o la menopausia, incrementan la sudoración y, con ello, el riesgo de olores desagradables. El estrés y la ansiedad también influyen: al liberar determinadas hormonas, el cuerpo estimula las glándulas sudoríparas como parte de un mecanismo de compensación.
A esto se suma el pie de atleta, una infección por hongos que suele aparecer entre los dedos y que, además de provocar irritación y descamación, genera un olor característico. El calor intenso del verano agrava el problema, especialmente para quienes no pueden usar sandalias en el trabajo y deben llevar calzado cerrado durante muchas horas, favoreciendo la humedad y la proliferación de bacterias.
Consejos de experta para decir adiós al mal olor en tus pies
La creadora de contenido y especialista en trucos para el hogar Aye Díaz (@soyayediaz) comparte fórmulas sencillas y efectivas para que tus zapatillas vuelvan a oler a limpio. Son remedios naturales, fáciles de aplicar y con ingredientes que probablemente ya tienes en casa.
1. Bolsitas de té: absorben humedad y neutralizan olores
Introduce una bolsita de té (seca y sin usar, a poder ser que sea negro) en cada zapatilla y déjala actuar toda la noche. El té funciona como un absorbente natural que atrapa la humedad y reduce los olores.

2. Bicarbonato de sodio: el clásico neutralizador
El bicarbonato es un aliado infalible contra los malos olores. Espolvorea una pequeña cantidad en el interior del calzado y déjalo reposar hasta el día siguiente. Por la mañana, sacúdelo bien. El resultado: unas zapatillas frescas y listas para usar.

3. Papel de periódico: secado exprés
Si los zapatos están húmedos, primero retira el exceso de agua con un paño. Luego, haz bolas con hojas de periódico (elige las que tengan menos tinta) e introdúcelas hasta la punta. También puedes envolver el exterior del zapato. Déjalos en un lugar ventilado y el papel absorberá la humedad.

4. Canela en rama: aroma y frescura
La canela no solo huele bien, también ayuda a absorber la humedad. Coloca uno o dos trozos dentro del zapato una vez por semana para mantener un aroma agradable y evitar la proliferación de bacterias.

5. Caja con arroz: secado natural
Llena una caja de cartón con arroz crudo e introduce los zapatos durante unas horas. El arroz absorberá la humedad de manera eficaz, dejando el calzado completamente seco.

6. Vinagre blanco: desinfección profunda
Mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua, rocía ligeramente el interior de los zapatos y deja que se sequen al aire. El vinagre es antibacteriano y combate los microbios que provocan el mal olor.

7. El truco del congelador
Coloca tus zapatos (secos) dentro de una bolsa de plástico hermética y mételos al congelador unas horas. El frío extremo destruye bacterias y hongos. Antes de usarlos, deja que recuperen la temperatura ambiente.

8. Hierbas aromáticas: frescor natural
Introduce saquitos con lavanda, menta o romero dentro del calzado. Estas plantas, además de perfumar, ayudan a mantener a raya la humedad y los malos olores.

Hábitos para prevenir el mal olor en el calzado
Aplicando estas recomendaciones, no solo conseguirás prolongar la vida de tus zapatos y mantenerlos impecables, sino que también evitarás problemas como el molesto pie de atleta. Porque cuidar el calzado es, en parte, cuidar de tu salud y tu comodidad.
Más allá de los trucos puntuales, lo ideal es evitar que la humedad y el mal olor se acumulen. Para eso:
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Ventila diariamente: No guardes los zapatos en armarios o zapateros justo después de usarlos; déjalos en un espacio ventilado hasta el día siguiente.
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Lávalos con regularidad: Siempre respetando el tipo de material y asegurándote de que sequen completamente antes de guardarlos.
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Alterna calzado: Evita usar el mismo par dos días seguidos para que pueda ventilarse.
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Usa calcetines limpios y transpirables: Preferiblemente de algodón o tejidos que absorban el sudor.
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Mantén la higiene de tus pies: Lávalos y sécalos bien cada día, prestando atención a la zona entre los dedos.