"Si el paciente lo hace bien, el resultado es bueno": la terapia para dormir y combatir el insomnio

Nos adentramos en uno de los trastornos silenciosos que más afectan a nuestra salud y productividad y analizamos las terapias más efectivas del sueño

La prenda para dormir bien y combatir el insomnio/ PEXELS
La prenda para dormir bien y combatir el insomnio/ PEXELS

El 14% de los adultos en España sufre insomnio crónico o así lo confirma un estudio reciente realizado por el Grupo de Trabajo de Insomnio de la Sociedad Española de Sueño, quienes han dedicado su labor a intentar investigar y trabajar sobre esta condición que tantas dificultades implica en las personas donde dormir es realmente un reto.

Una mujer a la que le cuesta conciliar el sueño/ EP
Una mujer a la que le cuesta conciliar el sueño tras tomar melatonina / EP

¿Qué a de suceder con tu descanso para considerar que tienes insomnio? Muy simple, tener absoluta dificultad para dormir o permanecer dormido al menos tres noches por semana durante más de tres meses, sin que haya otra enfermedad que lo explique, creando un caos en la cabeza de quien lo padece, mermando su calidad de vida y productividad.

Los riesgos de insomnio: peor economía y salud

Hace veinte años, este porcentaje era solo del 6,4%, pero actualmente con el auge de pantalla y estrés oxidativo de una vida frenética, los expertos advierten —y lo valoran— que el insomnio ya es un problema de salud pública, con consecuencias muy graves a nivel social en cuanto a economía y estado metal de los que lo padecen en el trabajo.

Una persona que padece insomnio y no sigue ninguno de los tratamientos / PIXABAY
Una persona que padece insomnio y no sigue ninguno de los tratamientos / PIXABAY

Un informe de la organización de investigación RAND Europe, titulado "Carga social y económica del insomnio en adultos", calcula que las pérdidas económicas anuales por la reducción de la productividad ascienden a más de 11.500 millones de euros en España, lo que equivale al 0,82% del PIB.

En el aspecto médico, se ha vinculado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas y metabólicas. En términos económicos, impacta en el ausentismo laboral, la reducción del rendimiento y el aumento de accidentes en el trabajo.

¿En qué consiste la Terapia del Sueño?

La Terapia Cognitivo-Conductual para el Insomnio (TCC-I) es el tratamiento más recomendado, ya que ha demostrado ser el más eficaz a mediano y largo plazo. Sin embargo, sigue siendo poco accesible. Un estudio publicado en la revista "Journal of Clinical Sleep Medicine" en enero señala que solo el 1% de las personas con insomnio en Australia acceden a esta terapia. En España no existen cifras exactas, pero se estima que el porcentaje podría ser ínfimo, ya que solo unas pocas Unidades de Sueño ofrecen este tratamiento en nuestro territorio nacional.

Profesionales de unos hospitales de Madrid donde se imparte esta Terapia del Sueño/ FREEPIK
Profesionales de unos hospitales de Madrid donde se imparte esta Terapia del Sueño/ FREEPIK

"Las guías recomiendan comenzar con terapia cognitivo-conductual, pero hay miles de pacientes que llevan años tomando hipnóticos y benzodiacepinas", señala el doctor Manuel de Entrambasaguas, neurofisiólogo clínico del Hospital Clínico de Valencia, subraya que el insomnio es un trastorno muy común, pero mal gestionado.

Dormir bien es esencial para regenerar el cerebro/ PEXELS
Dormir bien es esencial para regenerar el cerebro/ PEXELS

Odile Romero, coordinadora de la Unidad del Sueño del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, identifica varias causas de esta situación, pero las principales son la falta de especialistas y centros que brinden esta terapia, pues no es prioridad en la sanidad lo que no se considera una enfermedad de efecto cortoplacista.

Modelo 3 Factores: Una terapia para romper el insomnio

El modelo de los "tres factores" explica cómo se desarrolla y se mantiene el insomnio crónico. Primero, los factores “predisponentes” hacen que algunas personas sean más propensas a desarrollar insomnio. Luego, los factores “precipitantes”, como situaciones de estrés o cambios importantes en la vida, como pueden ser tales como una ruptura, el nacimiento de un bebé en el seno familiar o un cambio de trabajo. Finalmente, los factores “perpetuantes” que incluyen hábitos y pensamientos que prolongan el problema, como puede ser el consumo excesivo de estimulantes o una mala higiene del sueño. La TCC-I se centra en abordar estos últimos.

Una mujer padece alteraciones del sueño / PEXELS
Una mujer padece alteraciones del sueño / PEXELS

En los hospitales públicos españoles donde se ha implementado esta terapia con éxito, el tratamiento se ofrece en grupos de entre 4 y 10 personas, con entre 5 y 7 sesiones de una hora y media. Durante estas sesiones, los pacientes aprenden sobre higiene del sueño, técnicas conductuales para mejorar su descanso, estrategias cognitivas para recuperar la confianza en su capacidad de dormir y ejercicios de relajación.

La importancia de la conducta de los pacientes durante el tratamiento

Para Ainhoa Álvarez, neurofisióloga de la Unidad del Sueño de la OSI Araba y coordinadora del Grupo de Trabajo de Insomnio de la Sociedad Española de Sueño, destaca la efectividad de esta terapia, poniendo el foco en garantizar que la TCC-I sea la primera opción de tratamiento antes de recurrir a los fármacos.

Una persona sostiene varios somníferos / PEXELS
Una persona sostiene varios somníferos / PEXELS

"Los estudios han demostrado que esta terapia es mucho más eficaz cuando se aplica antes de iniciar un tratamiento farmacológico", explica. Sin embargo, advierte que el éxito depende en gran medida del compromiso del paciente: "Si sigue las recomendaciones adecuadamente, los resultados son muy positivos. Pero si no se implica o el terapeuta no logra transmitir la importancia de cumplir con las pautas, la terapia no funciona".

A pesar de los desafíos, los especialistas coinciden en la necesidad de ampliar el acceso a la TCC-I para mejorar el tratamiento del insomnio en España y reducir la dependencia de los medicamentos. La meta es integrar esta terapia en el sistema de salud para garantizar un manejo eficaz y sostenible del trastorno a largo plazo.