Orange “acosa” a un consumidor que ya se había dado de baja por una deuda falsa
La empresa de telecomunicaciones admitió, después de que el cliente presentara una reclamación a la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, que éste tenía razón
Los métodos a los que recurren las grandes empresas para reclamar deudas pueden llegar a ser hostiles y desproporcionados. Consumidor Global se ha hecho eco de reclamaciones por impagos que no siempre están contrastados, puesto que las compañías estiran el chicle al máximo y juegan en una zona de sombra. Así, hace unos meses, este medio publicó cómo Orange había cobrado 38 euros por una línea fantasma un mes y medio después de que el usuario diese de baja todos los servicios. Ahora, la entidad vuelve a las andadas.
Durante cuatro meses, la operadora de telecomunicaciones reclamó a un consumidor una deuda que él no había contraído. Lo hizo, además, bordeando la legalidad en algunas ocasiones.
Pago pendiente de 12 euros
C. Ferran recibió el pasado 6 de septiembre un correo en el que el departamento de cobros de Orange le decía que tenía pendiente un pago de 12 euros. En ese momento él ya se había dado de baja. “Me habían llamado previamente, pero yo no había cogido esas llamadas porque tengo activado el control anti spam”, explica a este medio.

Estos 12 euros correspondían a la facturación mensual por “suscripciones a Disney+ y Amazon Prime Video, a pesar de que ya no los tenía contratados”, cuenta a este medio. El tono era más amenazante que amigable: “Llegue a un acuerdo ventajoso y quede al corriente llamando al xxx. Evite el inicio de acciones legales”, espetaban a este consumidor cumplidor.
Dos días para formalizar la baja
La raíz del problema, explica Ferran, está en que Orange no fue lo suficientemente diligente a la hora de tramitar la baja: la ley marca que debe hacerlo en un plazo de dos días y ellos se demoraron casi 15. La legislación es muy clara al respecto: “El operador está obligado a dar la baja al usuario en un plazo de dos días desde que éste se lo haya comunicado. Por lo tanto solo podrá facturar hasta ese momento”, exponen.
No obstante, dado que suele haber líos, la Oficina de Atención al Usuario de Telecomunicaciones (dependiente del Ministerio para la Transformación Digital y la Función Pública) aconseja a los usuarios que se den de baja por teléfono que exijan al operador dos tipos de documentos:
- Que en ese mismo momento, se le proporcione el número de referencia de su baja. El operador está obligado a facilitarlo.
- Que el operador le envíe, por correo postal o electrónico, un documento que acredite la gestión que acaba de realizar.

Los cobros pasan a ser de 24 euros
Ferran lo hizo, a pesar de que llegó a hablar con una trabajadora del departamento de cobros de la empresa que llegó a sugerir por teléfono que este plazo de dos días les daba igual. Lejos de cesar, semanas después, estos cobros que Orange realizaba fuera de plazo engordaron sin ninguna justificación.
“Pasaron a cobrar 24 euros, luego casi 30… Todo sin justificación. Y entonces ya me cansé de llamarles, porque yo llamaba para intentar explicarles que había una reclamación interna a la empresa, y decidí devolver los recibos”, narra este consumidor.
‘Persecución’ por parte de Orange
Llegaron incluso, relata, a llamar a unos números de teléfono que están a nombre de familiares suyos. Puede parecer delirante, pero este medio publicó hace tres años cómo Orange llegó a llamar a la hija de un vecino de la playa de un consumidor en su persecución por un router.

En vistas de que el asunto no se solucionaba, Ferran decidió presentar una reclamación ante la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales. Y, tras la resolución de la misma, Orange se vio obligado a recular. “Enviaron una carta certificada en la que reconocieron los hechos, pero ni me han pedido disculpas ni nada. Tampoco me han adjuntado los recibos bancarios. Me estuvieron acosando con llamadas y mensajes durante cuatro meses. Ha sido un auténtico calvario porque ellos hicieron mal su trabajo”, concluye.
Un servicio que “quedó activo”
En este documento, Orange asume que Ferran se dio de baja antes de que se efectuaran los cobros. “Tras la baja de los servicios el 17/07/2025, se han emitido las facturas del 27/08/2025, 27/09/2025 y 27/10/2025, de 12,00 euros (impuestos incluidos) cada una, por el servicio de Disney+, Prime que quedó activo, pero se han realizado ya los siguientes ajustes al respecto”.
Es decir, que admite que hubo una baja, pero sin aclarar por qué reconoce que siguió rascando. Este medio ha preguntado a Orange por este caso, pero, al término de este reportaje, no ha obtenido respuesta.